Andrea Nante, directora del Museo y coordinadora científica del evento, lleva meses trabajando para seleccionar lo mejor de la ilustración mundial. Se pide a los artistas invitados que produzcan obras originales precisamente sobre el tema elegido para esta octava edición, a saber, el de la "Mesa", o más bien el de estar en la mesa.
“Para el hombre, no sólo la comida sino el acto mismo de compartirla es fundamental -subraya el director-: la nueva edición de la revista pretende reflexionar sobre la mesa para abordar ese lugar y esa situación que abre relaciones con los demás, yendo más allá al simple alimento físico.
Me siento a la mesa para satisfacer una necesidad y por la oportunidad de encontrarme y discutir con el otro.
La familia se sienta a la mesa y el gesto se convierte en una oportunidad para la narración y el diálogo. Los amigos se reúnen en la misma mesa por el placer de encontrarse y compartir tiempo. La degustación de nuevos y viejos sabores, el descubrimiento de las tradiciones de los comensales, la experimentación de novedades enriquecen y predisponen al conocimiento mutuo. Incluso en el lugar de trabajo, en la gestión empresarial, los momentos de convivencia son preciosos para sellar contratos y aclarar situaciones, para celebrar hitos.
Alrededor de la mesa encontramos el mundo, cada pueblo con sus tradiciones, colores y narrativas. Cada uno con sus propias experiencias y diferencias”.
Los ilustradores que ya han presentado su candidatura para poder participar en la exposición paduana son más de trescientos. Artistas de todo el mundo que, de las formas más variadas y originales, han investigado y explorado el tema de esta edición, en sus múltiples dimensiones. Confirmando la aceptación y actualidad del tema propuesto.
Muchas son obras llenas de encanto y sugerencias, ahora alegres, ahora melancólicas, en algunos casos muy personales, evidencia de experiencias familiares, junto con una interpretación del concepto de comunidad universal.
“Frente a este gran número de propuestas, anticipa Andrea Nante, la comisión científica tomará decisiones muy cuidadosas. Garantizar a nuestro público obras de gran nivel artístico y de contenido. Los Colores del Sacro son el evento más esperado por cientos de colegios que eligen nuestra exposición por su calidad y valor educativo. Aspectos que también se aplican a las miles de familias que abarrotan nuestros espacios o participan en nuestros talleres. Todo en busca de la belleza, la alegría, compartir contenidos y estímulos.
El nivel de los participantes nos permite garantizar una octava edición extraordinaria, creciendo incluso respecto a los ya altísimos niveles reconocidos por todos en la edición anterior”.