comparte

Muertos en 2020: de Morricone a Maradona y Pablito, los grandes que nos han dejado

Son muchos los protagonistas del espectáculo, la cultura y el deporte que nos han dejado este 2020 que está a punto de terminar. Acompañaron nuestras vidas, así los recordamos

Muertos en 2020: de Morricone a Maradona y Pablito, los grandes que nos han dejado

2020 fue el año del Covid, pero entre las palabras clave del año que dejamos atrás (la más "desgraciada" de la historia, según un algoritmo) también están los de muchos personajes famosos que nos han dejado. Protagonistas del espectáculo, del cine, del deporte, pero sobre todo de un mundo que ya no existe, simbólicamente (o en algunos casos de hecho, como para el escritor chileno Luis Sepúlveda) barridos por el virus que trastorna para siempre nuestras existencias. Además de la obra de estos personajes, algunos de alcance mundial, otros muy ligados a la cultura italiana, lo que extrañaremos será el mundo mismo que representaron: un trozo de nuestras vidas, que nunca hemos sentido más precario y vulnerable que este año.

Teniendo que dar un nombre, como italianos no podemos dejar de rendir homenaje a la desaparición de Ennio Morricone. El legendario compositor murió en Roma el 6 de julio, a la edad de 91 años. En su larguísima carrera, muy ligada al cine: la música de Morricone ha sido utilizada en más de 60 películas premiadas. Inolvidables son sus composiciones para La misión (1986) y Érase una vez en América (1984). Ganó el Premio de la Academia en 2016 por The Hateful Eight de Quentin Tarantino y el Lifetime Achievement Award en 2007 "por sus magníficas contribuciones al arte de la música de cine".

Representa un cine que ya no es ni siquiera el mítico Sir sean connery: el actor escocés ganó un Premio de la Academia en 1987 por Los intocables, pero se había convertido en una leyenda mucho antes, gracias a la insuperable interpretación del personaje de James Bond, que interpretó en siete películas, de 1962 a 1971. De también recordar sus papeles en la mencionada Intocables, pero también en El nombre de la rosa (basada en la novela homónima escrita por Umberto Eco, en la que interpretó a Guillermo de Baskerville), Indiana Jones y La caza del Octubre Rojo.

Tras mudarnos a Italia pero permanecer en el mundo del entretenimiento y la música, lamentablemente 2020 nos ha obligado a despedirnos de dos gigantes: Gigi Proietti, que murió en Roma el 2 de septiembre, en su cumpleaños, a la edad de 80 años, e Ezio Bosso, director de orquesta fallecido el 15 de mayo en Bolonia. Proietti fue el icono del mundo romano, heredero de monstruos sagrados como Nino Manfredi y Alberto Sordi: fue actor, humorista, locutor, cabaretista, presentador de televisión, director, cantante y director artístico. Recordamos su consagración cinematográfica en 1976 con Horse Fever, en el papel de la legendaria Mandrake, pero también muchas representaciones teatrales. Bosso fue un gran músico y también un símbolo para el mundo de la discapacidad: aquejado de una enfermedad neurodegenerativa desde 2011, siguió expresando su talento hasta su prematura muerte. El mundo del espectáculo también está de luto Franca Valeri, actriz y dramaturga milanesa, inolvidable intérprete de personajes como Miss Snob y Sora Cecioni.

El mundo de la literatura ha perdido algunos grandes nombres. Realmente fue el Covid el que nos llevó Luis Sepúlveda, poeta chileno fallecido el 16 de abril y símbolo eterno de la resistencia al régimen del general Augusto Pinochet. Publicó numerosas novelas, colecciones de cuentos y libros de viajes, entre los que destaca Historia de una gaviota y el gato que le enseñó a volar, pero Sepúlveda será recordado sobre todo por su militancia política: con motivo del golpe militar de Pinochet en 1973, el escritor estuvo en el palacio presidencial (donde murió Allende) y fue detenido y torturado. Pasó siete meses en prisión antes de ser liberado y encontrar asilo político en varios países europeos (es un francés naturalizado). El 12 de diciembre se despidió Juan Le Carre, autor británico de decenas de novelas de espionaje superventas: "The Spy Who Came in from the Cold" es considerada su obra maestra.

Muertes ilustres también en el mundo de la economía y la política, italianas y no italianas: el histórico ejecutivo de Fiat falleció en Milán el 18 de agosto Cesare Romiti. Llegó al Lingotto en 1974, para marcharse 25 años después, a finales de 1998: era el brazo derecho de Avvocato Agnelli y protagonista, aunque controvertido, de toda una temporada política e industrial. Se le recuerda por la histórica marcha de los 40.000 efectivos Fiat el 14 de octubre de 1980, así como por las estrechas relaciones con el responsable de Mediobanca Enrico Cuccia. Más recientemente, el 2 de diciembre a los 93 años, también falleció el expresidente de la República Francesa Valery Giscard d'Estaing, considerado entre los padres fundadores de Europa.

Por último, pero no menos importante, el enorme luto del mundo del deporte. Los que quizás más nos involucraron. Uno piensa inmediatamente en la desaparición del que es considerado el futbolista más fuerte de todos los tiempos, el argentino Diego Armando Maradona. Idolatrado en Nápoles, Argentina pero en todo el mundo, Maradona murió el 25 de noviembre en su casa de Tigre, un mes después de cumplir 60 años. El artista indiscutible del fútbol, ​​fue un personaje que en lugar de causó bastante discusión fuera del rectángulo verde, pero en el que al final se identificaron generaciones enteras: un campeón capaz de darle el triunfo mundial a Argentina y dos campeonatos históricos al Napoli.

En cambio, le dio a Italia el triunfo mundial, quizás el más hermoso de los cuatro. Paolo Rossi, el pablito nacional, héroe del Mundial 82 de España, donde fue pichichi (y Balón de Oro a final de año). Falleció el 9 de diciembre, a la edad de 64 años: su amabilidad, ese Mundial de 1982 y sus muchos goles con la selección pero también con Vicenza, Perugia y Juventus nunca serán olvidados. En la leyenda, el hat-trick ante Brasil de Zico, Sócrates y Falcao: ese 3-2 nos abrió el camino a la victoria final y nos recuerda un fútbol que quizás ya no existe y una época, la de los 80, de gran entusiasmo en el país.

El año había abierto con otra famosa muerte deportiva: el 26 de enero en Calabasas, California, desapareció trágicamente en un accidente de helicóptero, junto a su hija de 13 años, la campeona de baloncesto. Kobe Bryant. Criado en Italia, donde jugaba su padre y donde dio sus primeros pasos en el parquet (se mantuvo ligado a nuestro país toda su vida y aún hablaba italiano), Bryant es una leyenda de la NBA: fue la estrella de Los Ángeles durante veinte años. Lakers, arrastrándolos a conquistar 5 títulos de la NBA. Está considerado como uno de los mejores deportistas de la historia y antes de morir, con apenas 41 años, también consiguió ganar un Óscar, en la categoría de mejor cortometraje de animación, por Dear Basketball.

Revisión