Las aplicaciones industriales de la superconductividad son un 'Cáliz Sagrado' de la investigación aplicada. La posibilidad de hacer fluir la corriente eléctrica sin encontrar ninguna resistencia. – una posibilidad probada experimentalmente a temperaturas cercanas al cero absoluto – conduciría a ganancias de eficiencia capaces de crear una nueva revolución industrial, si tan solo la superconductividad pudiera replicarse a temperaturas más asequibles.
Se han realizado experimentos exitosos en Japón. transmisión de electricidad a través de cables de materiales superconductores, envueltos en una vaina en la que fluye nitrógeno líquido. El experimento involucró una sección de cableado de 240 metros de largo en una subestación de Tokyo Electric Power Co. y la energía transmitida fue considerable, suficiente para las necesidades de 50 hogares.
Este experimento, destinado a repetirse en mayores distancias, aunque la comercialización aún esté lejana, ha reducido a la mitad uno de los mayores problemas de la red de distribución eléctrica: las pérdidas por dispersión. El resultado no fue 'cero pérdidas' porque la energía adicional necesaria para enfriar los cables también se tuvo en cuenta en el resultado.
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