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Jerusalén capital: todos contra Trump. llamamiento del Papa

La voluntad del presidente estadounidense de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel y trasladar allí la embajada estadounidense ha provocado duras reacciones en el mundo árabe y preocupación entre los aliados, en Europa y en el Vaticano.

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha decidido: reconocerá a Jerusalén como la capital de Israel e instruirá al Departamento de Estado para que inicie el proceso para el traslado de la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén. La operación llevará su tiempo y el propio anuncio oficial, filtrado a través de fuentes citadas por el New York Times y CNN, no está claro si llegará hoy 6 de diciembre o en los próximos días tras las presiones sobre la Casa Blanca por parte de aliados, europeos cancillerías y países árabes. La decisión, incluida en el programa electoral de The Donald, suscitó de inmediato la dura reacción de los palestinos que amenazan con una nueva Intifada.

Sin embargo, la embajada de Estados Unidos en Israel no se trasladará a Jerusalén hasta dentro de seis meses. Así lo informaron fuentes de la administración estadounidense, subrayando cómo Donald Trump firmará una prórroga que dejará la representación diplomática en Tel Aviv por al menos otros seis meses.

Donald Trump informó el martes tanto al presidente palestino Abu Mazen como al gobierno israelí de su decisión. Según el diario local Wafa Abu Mazen advirtió a Trump “sobre los peligros de tal decisión sobre el proceso de paz, sobre la seguridad y la estabilidad en la región y en el mundo”. El primer impacto de los rumores se vio en la Bolsa de Valores de Tokio, donde el índice Nikkei perdió casi un 2% en el cierre debido a la preocupación vinculada al inminente anuncio del presidente estadounidense, Donald Trump, sobre Jerusalén, la capital de Israel. El índice Nikkei cayó un 1,97%, o 445,34 puntos, a 22.177,04, mientras que el índice Topix perdió un 1,43%, o 25,55 puntos, a 1.765,42.

Las reacciones a las intenciones del presidente Trump han sido muy animadas en todo el mundo y la preocupación crece, desde China hasta Londres, mientras los países árabes se unen y el Papa lanza un llamamiento para que las cosas permanezcan como están para no poner en peligro el proceso de paz.

Los palestinos anunciaron “3 días de rabia” de miércoles a viernes en protesta contra la voluntad de Donald Trump de trasladar la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén. Todas las facciones palestinas han condenado a Trump calificando su política de "chantaje". “Hacemos un llamado a todo nuestro pueblo en Israel y en el mundo -dijeron- para que se reúnan en los centros de las ciudades y frente a las embajadas y consulados israelíes con el objetivo de despertar la ira popular general”.

Francisco y el presidente palestino Abu Mazen (Mahmoud Abbas) hablaron por teléfono sobre el tema relacionado con el anuncio del traslado de la embajada estadounidense en Israel de Tel Aviv a Jerusalén. Así lo confirmó a ANSA el portavoz de la Santa Sede, Greg Burke, precisando que la conversación se produjo "por iniciativa de Abbas".

“Mis pensamientos ahora se vuelven hacia Jerusalén. En este sentido, no puedo silenciar mi profunda preocupación por la situación vivida en los últimos días y, al mismo tiempo, hacer un llamado de corazón para que todos se comprometan a respetar el statu quo de la ciudad, de acuerdo con las Resoluciones pertinentes. de los Unidos", dijo entonces el Papa en la audiencia general, invitándonos a "la sabiduría y la prudencia, para no añadir nuevos elementos de tensión a un panorama mundial ya convulso y marcado por tantos conflictos crueles".

Abu Mazen telefoneó previamente al presidente ruso, Vladimir Putin, informándole "de amenazas a la ciudad de Jerusalén". El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que el martes definió Jerusalén como una "línea roja" y planteó la posibilidad de una ruptura de relaciones con Israel, verá re Abdullah II de Jordania en Turquía, con motivo del 70 aniversario de las relaciones diplomáticas entre Ankara y Amman. Obviamente, el tema de Jerusalén también está en la agenda.

El enviado especial de la ONU para Oriente Medio Nickolay Mlándenov, reiteró que el futuro estatus de Jerusalén debe ser objeto de negociaciones. China también se expuso, "preocupada" por el posible empeoramiento de "una situación ya de por sí complicada y delicada".

En Londres, el gobierno dice que está "preocupado". El Ministro de Asuntos Exteriores británico Boris Johnson, al llegar a una reunión de la OTAN en Bruselas, precisó: "Pensamos que Jerusalén debería ser realmente parte de una solución definitiva al conflicto entre israelíes y palestinos, una solución negociada".

Finalmente, el sistema de defensa israelí se está preparando para un "posible motín violento palestino en Israel, principalmente en Jerusalén. La policía israelí, el Shin Bet y el mando central del ejército - informan los medios israelíes - han mantenido numerosas reuniones a tal efecto en los últimos días.

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