Son cientos y cientos de enólogos y productores de vino de calidad, reunidos bajo el hashtag #ilvinononsiferma que, orgullosos de su papel, quieren estar en condiciones de seguir representando a Italia en el mundo.
El vino es parte de la cultura italiana -se lee en una carta abierta- y la punta de lanza del Made in Italy; es un componente fundamental de la dieta mediterránea, protegido como patrimonio de la humanidad. El vino es un valor que hay que conservar y promover, no destruir”.
Por ello, apelan al Ministro de Agricultura y al Gobierno, que actualmente deciden el destino de miles de valiosas empresas, a que no adopten medidas que degraden a un sector productivo de excelencia. La destilación reduce el valor percibido del vino italiano y daña su reputación en todo el mundo.
“Por supuesto que nuestras actividades deben apoyo financiero inmediato, porque venimos de meses sin recibos y con gastos regulares”. los bodegueros denuncian “¡Porque la viña no para!”
Entre las solicitudes, además del almacenamiento de vinos de calidad como alternativa a la destilación, "Pedimos al Gobierno que tome nota e intervenga sobre las dificultades de implementación real de las medidas ya adoptadas, liquidez de 25.000€ y desembolso de despidos con un anticipo de los bancos.”, medidas teóricamente establecidas desde hace meses pero aún no operativas en muchas partes de Italia.
Y siguen preguntando “al Gobierno que restablezca la medida de las hipotecas a 15 años presente en el primer decreto y luego desapareció, ¡porque esos son los tiempos de la agricultura!” destacando la diferencia concreta entre la depreciación en los sectores industrial y agrícola.
No se destruye el fruto de la historia, la cultura y el trabajo de los territorios que están en la imagen colectiva de los viñedos italianos de excelencia. La calidad no se destruye, se conserva, se custodia. “Pedimos una medida que no destruya sino que conserve el vino, nuestro patrimonio económico y cultural, el almacenamiento”.
Esta medida fue autorizada por el reciente Reglamento Europeo n. 2020/592. Con el "almacenamiento", el vino ya producido estaría destinado a la refinación y no a la destrucción. “Dedicar recursos económicos al almacenamiento significa apoyar el vino de calidad, que mejora con el envejecimiento y aumenta, en lugar de destruir, el valor del vino producido”.
Los enólogos, al igual que el resto del país, necesitan respuestas urgentes y acciones oportunas, dado que la vendimia está a la vuelta de la esquina”Después de la emisión del Reglamento Europeo, solicitamos que el gobierno italiano implemente inmediatamente la medida de almacenamiento y la ponga a disposición de todos los productores de vino de calidad con un presupuesto adecuado. Si las Regiones van a incluirlo en sus planes, debe quedar muy claro que es necesario reducir la burocracia tanto como sea posible, es necesario ser inmediato, porque falta poco más de un mes y luego en algunas partes de Italia. ¡comenzará la cosecha y por lo tanto es necesario tener espacio para el vino nuevo! Pedimos que el valor de nuestro trabajo sea verdaderamente defendido y no destruido”.
