Las negociaciones entre los gobierno griego y Troica (UE, FMI y BCE) han sido suspendidos. La decisión sobre el envío del próximo tramo de ayuda se pospone hasta abril. Los representantes de los acreedores internacionales, que llevaban dos semanas en Atenas para la habitual verificación trimestral de las cuentas del país, abandonaron la ciudad sin haber llegado a ningún acuerdo con el Ejecutivo de Antonis Samaras sobre los próximos pasos a seguir.
Según fuentes cercanas a Atenas, una de las principales diferencias es sui despidos en el sector publico. Los inspectores de la Troika volverán a Atenas el próximo mes: se espera que se conceda una nueva cuota de préstamo de 2,8 millones a finales de abril.
Sin embargo, los inspectores de la Troika señalan en una nota “los importantes avances ya realizados, aunque aún quedan algunas cuestiones por resolver. Para hacer esto, se requerirá más trabajo técnico. La misión espera regresar a Atenas a principios de abril para continuar el trabajo”.