El gobierno griego ha aprobado el recorte de 30 trabajadores públicos, implementando un acuerdo preliminar alcanzado con los jefes de la delegación UE-FMI-BCE. Hoy llegan al Parlamento las nuevas medidas de austeridad para su aprobación definitiva. El nuevo recorte solicitado por Europa debería servir para desbloquear el sexto tramo de ayuda de 8 millones de euros, decisivo para evitar el impago. Aunque, a pesar de estos sacrificios, el déficit de Atenas será del 6,8% del PIB frente al 6,5% acordado con los representantes de la troika. Pero muy reducido respecto al 8,5% actual. Incluso el PIB esperado se mantiene por debajo de las expectativas, un 5,5% menos.
La determinación de George Papandreou encuentra apoyo en vísperas de la cumbre Ecofin en Luxemburgo. "Con toda probabilidad, Grecia recibirá el próximo tramo de ayuda internacional que necesita para evitar la bancarrota", dijo la ministra de Finanzas de Austria, Maria Fekter, en una entrevista con el diario alemán Welt am Sonntag. "La probabilidad de que el tramo de 8 millones de euros se pague a Grecia, en mi opinión, es mucho más fuerte que la probabilidad de que no sea así", dijo Fekter. Mientras tanto, sin embargo, Alexander Dobridnt, un funcionario de la coalición de Angela Merkel, dijo que "para que Grecia vuelva a ser económicamente estable, necesita salir de la eurozona, al menos temporalmente".