Atenas ha preparado una airada bienvenida a los miembros de la troika, que regresan hoy a la capital griega tras casi un mes de ausencia. "Coge tu plan de rescate y márchate", es la consigna coreada por los cerca de 200 empleados del Ministerio de Hacienda griego que desde esta mañana bloquean las vías de acceso a la sede del ministerio ateniense. Aquí mismo el ministro griego Evangelos Venizelos debería reunirse con los representantes de la UE, el FMI y el BCE. El objetivo de los manifestantes es obstaculizar su cita.
La troika deberá evaluar el estado de salud de las finanzas griegas en los próximos días. El 2 de septiembre, la misión se interrumpió debido a la falta de reducción de la deuda pública y los retrasos en las reformas y privatizaciones. Todas las medidas que Grecia había acordado con Europa para obtener el nuevo tramo de ayuda por valor de 8 millones. En las últimas semanas, el Gobierno socialista ha puesto en marcha nuevas medidas, entre ellas un impuesto sobre bienes inmuebles y nuevos recortes en las pensiones.
"Las ocupaciones se están llevando a cabo hoy -escribe Adedy, sindicato del sector público griego- cuando la troika regresa a nuestro país mientras nos enfrentamos a nuevas medidas bárbaras que se han decidido y se siguen decidiendo sobre reducciones salariales, aumentos de impuestos y despidos masivos". Mientras tanto, la ciudad está completamente paralizada por el tercer día de huelga del transporte.
