Eni y Hera firmaron hoy una asociación destinada a transformar el aceite vegetal usado en biocombustible para alimentar los vehículos de recolección de residuos de la empresa Hera.
El acuerdo prevé que los aceites vegetales usados de uso doméstico, como los de freír, recuperados por Hera a través de unos 400 contenedores de carretera y en unos 120 centros de recogida, serán enviados a la biorrefinería de Eni en Venecia, en Porto Marghera, el primer ejemplo en la conversión mundial de una refinería de petróleo en una biorrefinería, que lo transformará en gasóleo verde, un producto totalmente renovable que supone el 15% de Enidiesel+. El biocombustible alimentará los vehículos de la empresa Hera para la recogida de residuos urbanos. En fase experimental, Enidiesel+ será utilizado por una treintena de grandes vehículos, con el fin de optimizar el beneficio medioambiental, en la zona de Módena.
El acuerdo firmado hoy amplía el círculo virtuoso ya iniciado por Eni con las empresas de servicios públicos múltiples de Turín, Venecia y Roma y cuyas pruebas se llevaron a cabo. ya han demostrado importantes beneficios en términos de calidad del aire, económicos e industriales. De hecho, frente al diésel tradicional, Enidiesel+ tiene un componente renovable que reduce las emisiones contaminantes hasta en un 40%, lo que permite un ahorro en el consumo de alrededor del 4% y una reducción en los costes de mantenimiento del motor. Los mismos parámetros de mejora técnica derivados del uso de biocombustibles serán objeto de seguimiento conjunto por parte de las dos empresas, en colaboración con el Istituto Motori de la CNR.
Para seguir apoyando la iniciativa, Hera ha optado por mejorar la recolección de aceites vegetales en las carreteras con la introducción de 300 nuevos contenedores dedicados en los territorios atendidos. Solo en 2017, se recolectaron, recuperaron y luego procesaron 800 toneladas de aceites vegetales usados para ser utilizados como lubricantes o mediante recuperación de energía. Un servicio cada vez más extendido que, fomentando la correcta recuperación, pretende también prevenir conductas, como el vertido de aceites en el fregadero, perjudiciales para las tuberías domésticas y los sistemas de depuración de agua.
“Con la conversión de la refinería de Venecia, la primera del mundo en ser transformada en biorrefinería, a la que en unos meses se sumará también la refinería de Gela, también remodelada al biociclo – comenta Giuseppe Ricci, Director de Refinación y Marketing de Eni – Eni ha iniciado el proceso de transición energética en el que los biocombustibles juegan un papel cada vez más importante en el proceso de descarbonización de nuestro planeta. Con el acuerdo firmado con Hera, sumamos un elemento importante a nuestro compromiso concreto con la economía circular y consolidamos el uso de residuos, el aceite de fritura, como materia prima importante para la producción del innovador combustible Enidiesel+, en sustitución de materia prima comestible. . Gracias a las iniciativas y acuerdos que Eni ha desarrollado tras el acuerdo con CONOE (Consorcio Nacional para la recogida y tratamiento de grasas y aceites vegetales y animales usados) y con sus asociados individuales, hoy más del 50% del aceite de fritura usado cosechado en Italia es transformado en biocarburante en la biorrefinería de Venecia, con claras ventajas para el medio ambiente y para los numerosos agentes económicos del sector”.
“Un modelo de economía es realmente circular si se ocupa de todo el ciclo de vida de los recursos, con verdaderas alianzas entre empresas responsables y ciudadanos, más allá de la gestión de la fase terminal, es decir, la recogida de los residuos, quizás entregados a terceros. es el comentario de Stefano Venier, director ejecutivo del Grupo Hera –. En este sentido, Hera apuesta no solo por alargar el ciclo de vida de los materiales, a través de iniciativas de reciclaje y reutilización, sino también por desarrollar soluciones y plantas destinadas a transformar materiales en nuevos productos u obtener energía de ellos, especialmente en la cadena de suministro orgánica. El acuerdo con Eni da continuidad a esta orientación, identificando un nuevo campo de aplicación en el que potenciamos el material recuperado, contribuyendo a la descarbonización y la eficiencia energética. El aceite usado que se convierte en biocombustible con huella ambiental avanzada y se reutiliza para la recogida de residuos es un perfecto ejemplo de economía circular, que se enmarca en la estela de las numerosas iniciativas que ya hemos puesto en marcha en este ámbito”.
