Mario Draghi hoy en Berlín, en un discurso al Frankfurter Allgemeine Zeitung, habló de un plan para reforzar el capital de los bancos sobre el que en estos momentos hay "una presión muy fuerte por falta de capital y fondos". Un plan que pasa por tres caminos: la ampliación de capital, la venta de activos y la reducción de préstamos pero, dijo Draghi, la reducción del crédito sería la peor solución. La invitación por tanto es a evitar la reducción del crédito a la economía real. El presidente del BCE en cambio espera la reducción de dividendos a favor del fortalecimiento de las instituciones. Presionar a los bancos para que se recapitalicen no es un proceso simple, dijo Draghi, y las instituciones financieras deberían considerar recortar los dividendos.
En el frente de la Existen "riesgos sustanciales a la baja" para el crecimiento económico de la eurozona. En las condiciones actuales, "el impacto del recorte de la tasa de interés se debilita", dijo. La eurozona experimentará una inevitable contracción económica a corto plazo y los efectos solo pueden mitigarse con un retorno de la confianza.: ”a mediano plazo, el crecimiento sostenible solo puede lograrse con reformas estructurales pospuestas demasiado tiempo”.
Draghi, que subrayó la importancia de un cortafuegos para combatir las amenazas a la estabilidad del mercado, reiteró a continuación que las compras de valores por parte del BCE no son "eternas ni infinitas". La respuesta debe venir principalmente de los gobiernos nacionales que, sin embargo, subrayó, van por el buen camino.
