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Confindustria: la recuperación es posible

Según los analistas del Centro de Estudios Confindustria, “la desconfianza ha comprimido la demanda más allá de lo que justifica la situación objetiva” - Al mismo tiempo “están desapareciendo o atenuándose las tres causas del declive: contracción del crédito, hiperrestricción de los presupuestos públicos y desaceleración de la demanda global” – Pero de las elecciones debe surgir una “mayoría sólida”.

Confindustria: la recuperación es posible

La economía italiana "está tocando fondo de una dura recesión, la segunda en cinco años", pero "están surgiendo las condiciones para un repunte que pueda impulsar la recuperación". Así lo subraya el Centro de Estudios Confindustria en su último informe.

“La desconfianza ha comprimido la demanda interna mucho más de lo que justifica la situación objetiva de los presupuestos familiares y empresariales –escriben de nuevo desde Via dell'Astronomia-. Las compras de bienes duraderos han caído mucho más que la renta real disponible, las inversiones están en mínimos históricos en relación con el PIB y los inventarios son muy reducidos. Al mismo tiempo, las tres causas del declive desaparecen o se suavizan: contracción del crédito, hiperrestricción de los presupuestos públicos y desaceleración de la demanda global”. Un sector destinado a permanecer débil es el de la construcción, para el que "deben tomarse medidas específicas". 

Según Confindustria, para el reinicio es fundamental que "el resultado de las próximas elecciones dé al país una sólida mayoría, que tenga como prioridades las reformas y el crecimiento, brindando así un marco claro que infunda confianza en el futuro y dirija favorablemente las decisiones de consumidores y empresarios".

En cuanto a la situación internacional, “la incertidumbre política casi se ha disuelto en el sistema global (falta la votación de otoño en Alemania). Hay signos continuos de progreso, algunos incluso en la zona euro, gracias al "contagio positivo" desencadenado por las decisiones del año pasado del BCE (que, sin embargo, sigue siendo tímido en las tasas) y los gobiernos. Esto ha puesto en marcha una 'mejora dramática' en las condiciones financieras globales y un retroceso en la aversión al riesgo, que continuarán; los PIIG se beneficiarán sobre todo, estresados ​​por el agotamiento de la liquidez".

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