Todavía hay incertidumbre sobre la cantidad de cazas F-35 que Italia debería comprar: el umbral actual de 90 fue propuesto de forma independiente por el Ministerio de Defensa, pero existe un compromiso parlamentario previo de 131 ejemplares. Serán por tanto las Cámaras las que tendrán que pronunciarse sobre la cuota final. Así lo explicó esta mañana el ministro de Defensa, Mario Mauro, durante su visita a la feria aeroespacial de Le Bourget en París.
El ministro volvió a defender la utilidad del proyecto multilateral tanto en términos generales como cuantitativos. Mauro afirmó que “la pregunta que hay que hacerse es si necesitamos una aviación militar: yo creo que sí y con 90 aviones haríamos el trabajo de 250. El programa puede ofrecer muchas oportunidades, espero que el diálogo parlamentario pueda profundizarlas. En términos de rentabilidad económica y estratégica, el orden tiene sentido por encima de cierto umbral”.
El ministro dijo entonces que estaba tranquilo de que el Gobierno se aferrara a la polémica ligada al F35, dado que el Partido Demócrata aprobó el proyecto, votándolo en el Parlamento. Solo 14 (de 160 signatarios) diputados demócratas han firmado la moción de reducción o abandono total del programa.