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Hidromasaje: alto a los incentivos, pero cierre en la balanza

El ministro Di Maio ha revocado ayudas públicas por 15 millones de euros a la empresa de electrodomésticos, pero la solución al litigio aún está lejos - Hoy se reanuda la negociación con el ministerio

Hidromasaje: alto a los incentivos, pero cierre en la balanza

Italia usa el puño duro contra Whirlpool, pero la solución del problema aún está lejos. Como prometió, al vencimiento del ultimátum de siete días, el Ministro de Desarrollo Económico, Luigi Di Maio, retiró ayudas públicas por 15 millones de euros a la empresa de electrodomésticos.

"Es el dinero de los italianos - dijo el viceprimer ministro grillino en un video en Facebook - esos 50 millones que se han llevado desde 2014 hasta hoy y que les estoy empezando a retirar porque no han cooperado y siguen diciendo que quieren desvincularse de la planta de Nápoles. En Italia ya no bromeamos, la era Bengodi ha terminado”.

La negociación se reanuda hoy a las 17 horas, cuando se reanudará la mesa de diálogo en el Ministerio de Desarrollo Económico.

Mientras tanto, Whirlpool respondió a Di Maio destacando “que nunca ha cancelado todavía el acuerdo firmado en octubre y sobre todo de no tener la intención de cerrar el sitio de Nápoles, sino comprometerse a encontrar una solución que garantice la continuidad industrial y los más altos niveles de empleo”.

De hecho, la empresa vuelve a proponer el mismo comunicado de prensa ya publicado a fines de mayo y ni siquiera plantea una hipótesis de posible solución: "Durante la reunión en el ministerio -concluye Whirlpool- esperamos poder iniciar el proceso con el instituciones presentes y las organizaciones sindicales destinadas a dirimir el conflicto".

Ad oggi, la única salida sería ceder la planta a un posible tercero. Sin embargo, el proyecto encuentra la oposición de los sindicatos, porque la empresa se había comprometido a trasladar la producción de lavadoras de alta gama a Nápoles.

El líder de la CGIL, Maurizio Landini, dijo que “no es que quitando los incentivos a Whirlpool pueda irse y cerrar las fábricas, el punto es hacer cumplir los compromisos que se han hecho”.

Para la Uil de Carmelo Barbagallo "es un primer paso para acabar con el poder desmesurado de las multinacionales", mientras que un segundo Annamaria Furlan (Cisl) el hecho de que "el gobierno finalmente haya dado un golpe" es una buena noticia.

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