Tras cero devoluciones, las comisiones también llegan a las cuentas corrientes. Aquellos que estacionen grandes sumas en depósitos bancarios no solo no verán reconocido ningún interés -como ha sido el caso durante años- sino que incluso tendrán que pagar. El gran paso lo están dando algunos bancos estadounidenses que, según el Wall Street Journal, se han puesto en contacto con los grandes clientes (empresas, fondos y aseguradoras) para anticiparse a la noticia e instarles a mover el dinero de los depósitos a otras inversiones.
¿Por qué tal movimiento? Las instituciones americanas justifican la decisión explicando que la nueva normativa estadounidense encarece a los bancos tener cierto tipo de depósitos en sus carteras, con el fin de limitar el alcance de cualquier shock sistémico al evitar la retirada repentina de sumas demasiado elevadas.
Para reactivar las inversiones, en septiembre el Banco Central Europeo había dado luz verde a una medida similar, provocando que los tipos de las sumas depositadas por los bancos de la Eurozona en las cajas fuertes virtuales de la Eurotower cayesen en territorio negativo. El principio subyacente es el mismo: estacionar dinero debe ser menos rentable que invertirlo.
