La mayoría de los asesores dicen que las estrategias de inversión centradas en cupones (por ejemplo, aquellas que se basan en pagos de dividendos o intereses) son una opción preferida para muchos ahorradores. Estas estrategias son, de hecho, fáciles de entender y administrar para proteger el capital inicial mientras se utiliza un enfoque más sostenible a largo plazo. Sin embargo, priorizar la simplicidad y la protección del capital por sí solos no suele ser el mejor enfoque.
Los límites y riesgos de una estrategia centrada en los ingresos dependen del enfoque utilizado. Entre las clases de activos e instrumentos que generan ingresos dentro de las carteras de los clientes, los consultores citan, por ejemplo, acciones que pagan dividendos, REIT, bonos corporativos, alto rendimiento.
Pero al evaluar una estrategia, considere de dónde provienen estos ingresos y asegúrese de administrar cuidadosamente los riesgos asociados. Algunos de estos riesgos, por ejemplo, pueden estar subestimados:
• Centrarse en los rendimientos a corto plazo a expensas del crecimiento a largo plazo;
• Los bonos de alto rendimiento pueden convertirse en bonos basura;
• Demasiada concentración en términos de clase de activo o sector;
• Demasiado enfoque en los activos del propio país;
• Liquidez de cartera propia.
Para ayudar a disminuir el nivel de riesgo y la volatilidad de su cartera, las soluciones de generación de ingresos deben apuntar a un nivel sostenible de rendimiento a través de un enfoque multiactivo bien diversificado que considere 4 factores:
• Equilibrio: equilibre las necesidades de rendimiento a corto plazo con los objetivos de crecimiento a más largo plazo.
• Diversifique: asegúrese de que su cartera esté estructurada en torno a una combinación de estrategias, clases de activos e inversiones geográficamente diversas.
• Mida el Riesgo: Evite ir demasiado lejos en la búsqueda del retorno. El riesgo siempre debe ser adecuado al perfil del inversor individual y su capacidad para tolerar riesgos.
• Adaptar: las clases de activos generadores de ingresos pueden requerir ajustes dinámicos en la asignación de activos. Por lo tanto, es necesario garantizar que una cartera tenga la capacidad adecuada para adaptarse de manera rápida y flexible.
En nuestra opinión, la mejor manera de gestionar estos factores es adoptar un enfoque de rendimiento total que tenga en cuenta tanto los intereses, los dividendos y la revalorización del capital al considerar la capacidad de generación de ingresos.
Reenfocar la conversación en las metas, preferencias y necesidades del cliente puede ayudar a los asesores y promotores a construir un plan financiero que pueda adaptarse a las necesidades a corto plazo sin poner en peligro la capacidad de lograr las metas financieras deseadas.
Por lo tanto, cuando se trata de generar ingresos, es importante considerar todos los riesgos y oportunidades potenciales para alentar al inversionista a equilibrar sus preocupaciones actuales con estrategias que puedan ayudarlo a lograr la seguridad financiera en el futuro.
