comparte

Squinzi más pesimista que Monti: "2013 no será el año de la recuperación"

El Centro de Estudios Confindustria ha confirmado las previsiones de una caída del PIB del 2,4% en 2013 - Será un año complicado pero "no hay que dejar de pedalear, hay que seguir adelante" - La recuperación "puede venir de nosotros si creemos en ella pero hay que enfocarse en lo que necesita el país: “investigación e infraestructura”.

Squinzi más pesimista que Monti: "2013 no será el año de la recuperación"

"Esperemos que la situación no empeore". De todos modos para el presidente de Confindustria Giorgio Squinzi El 2013 que espera Italia no será el año de la recuperación económica, como espera el primer ministro Mario Monti. “Lamentablemente, las previsiones de PIB que nuestro Centro de Estudios ya había indicado de mayo-junio, las de una caída del 2,4% del PIB, han sido confirmados”, afirmó Squinzi durante el encuentro de los industriales de Latina en Fossanova. Y, añadió con pesar, “no teníamos dudas”.

Aunque pesimista, sin embargo, el presidente de los industriales no se deja desanimar. “Como digo, como ciclista… nunca debes dejar de pedalear, debe continuar“. Y Squinzi nos invita a tener más fe en las capacidades de nuestro país. “No hay muchas alternativas, hay que esperar un reinicio que puede venir de muchas cosas, pero sobre todo puede venir de nosotros si creemos en ello y si volvemos a invertir en nosotros, en nuestras actividades, en lo que necesita el país: investigación e infraestructura”.

Pero hay una cosa que asusta al presidente de Confindustria: la carga fiscal. “Utilizando la implementación completa de todas las medidas fiscales previstas por las últimas maniobras financieras”, dijo, “la carga fiscal italiana rondaría el 45% en los próximos años frente al 42,1% de 2011, que se convierte en casi el 55% si se hace el cálculo restando el PIB subterráneo”. 

En el caso fíat Squinzi no se pronuncia. “Ya no tengo derecho a hablar de eso”, ya que el Lingotto ya no forma parte de Confindustria. Pero, no obstante, subraya que "un gran país como Italia no puede dejar de tener una gran empresa de automóviles".

 

 

Revisión