La agencia de calificación estadounidense Standard & Poor's confirmó el rating soberano de España en BBB-/A-3, con perspectiva negativa, según informa la web de la agencia.
Por lo tanto, S&P mantiene su propia sentencia sobre la deuda española un escalón por encima del sector chatarra, similar a Moody's, mientras que Fitch tiene una calificación dos escalones por encima de altamente especulativa.