comparte

Sufrimiento, Visco: "Estamos en un punto de inflexión"

El gobernador en una audiencia en el Senado: "Atlante estará en línea con las normas europeas de ayudas estatales" .

El alto nivel de morosidad sigue siendo el principal factor de vulnerabilidad de los bancos italianos, pero “podríamos estar en un punto de inflexión”. Así lo aseguró el gobernador del Banco de Italia, Ignazio Visco, durante una audiencia en la Comisión de Finanzas del Senado.

“La consolidación de la recuperación económica -añadió- es una condición esencial para que continúe la reducción del stock de exposiciones dudosas”. El fondo Atlante contará con recursos de al menos 4 millones y estará "en la línea de las normas europeas sobre ayudas de Estado", prosiguió Visco, precisando que la intervención privada ahora "está siendo examinada por el BCE".

Justo hoy, la ABI anunció en su informe mensual que en febrero los préstamos improductivos netos registrados por los bancos italianos cayeron a 83,1 millones, desde los 83,6 millones de enero. Respecto al mismo mes de 2015, la cifra marca un aumento del 4,8% (+3,8 millones), en cualquier caso una ralentización respecto al +5,3% de finales de 2015. Hace dos meses, por tanto, la ratio entre morosidad neta préstamos y préstamos totales se situó en 4,6% (4,64% en enero de 2016 y 4,39% en febrero de 2015).

En cuanto a Mps, “como resultado del proceso de revisión y evaluación supervisora ​​(Srep) de 2015 –agregó el gobernador– se han constatado algunas debilidades, siendo la principal el peso de la morosidad. La situación de la empresa continúa siendo seguida de cerca. El peso de la morosidad es también efecto de la estrategia crediticia muy expansiva seguida antes del estallido de la crisis, en la que el banco trabaja ahora activamente”.

También en Mps “también nos pidieron poner en marcha soluciones estructurales, a través de un proceso de integración con otros intermediarios”, concluye Visco.

Además, el gobernador del Banco de Italia no ha ahorrado críticas a la nueva legislación europea sobre resolución de crisis bancarias que ha llevado a la aplicación de la bail-in en el caso de los cuatro bancos regionales Banca Marche, Banca Etruria, Carichieti y Carife. “La respuesta regulatoria sobre gestión de crisis -destacó Visco- ha creado incertidumbre sobre las inversiones en pasivos bancarios. Un instrumento diseñado para reducir el impacto de una crisis no puede crear las premisas para hacerla más probable: si es así, hay que revisarla”.

Revisión