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Parmigiano Reggiano en guerra con Kraft por el queso parmesano en Nueva Zelanda

Guerra legal en Nueva Zelanda por la enésima imitación de la comida italiana. La comercialización en el extranjero de falsificaciones made in Italy valorada en 100 mil millones de euros, duplica nuestras exportaciones. Dos de cada tres productos italianos vendidos en el extranjero son falsos.

Parmigiano Reggiano en guerra con Kraft por el queso parmesano en Nueva Zelanda

No más imitaciones de las marcas agroalimentarias Made in Italy más prestigiosas en el extranjero. El último, pero solo en orden cronológico, teatro de guerra legal serán los tribunales de Nueva Zelanda. De hecho, el Consorcio de Parmigiano Reggiano ha demandado a la multinacional Kraft Foods Group Marcas LLC para evitar que llegue registró 'Kraft Parmesan Cheese' como marca oficial en Nueva Zelanda”, lo que perjudicaría enormemente a uno de los productos de excelencia Made in Italy.

“El Consorcio de Parmigiano Reggiano – afirmó el presidente Nicola Bertinelli – ha registrado la marca del Rey de los quesos en Nueva Zelanda durante más de 20 años y con esta acción pretende proteger los intereses de los productores de DOP de intentos de registro que serían contrarios a la ley. , y perjudicial para los consumidores de Nueva Zelanda y los productores italianos”.

 “Estaremos siempre –añadió Bertelli– a la vanguardia tanto en las fases de negociación de acuerdos internacionales como en el ejercicio de funciones de protección para defender un derecho a la transparencia que consideramos sacrosanto para los consumidores de todo el mundo. No es fácil para las queserías de Parmigiano Reggiano tratar con multinacionales de más de 20 millones de euros, el Consorcio está y estará siempre del lado de Davide en la lucha contra los gigantes".

Entre otras cosas, del 30 de agosto al XNUMX de septiembre, el Consorcio de Parmigiano Reggiano es uno de los protagonistas de “Identidad de Origen. Dop e Igp de Italia y Europa” en FICO Eataly World of Bologna: un encuentro internacional y tres días de revisiones de mercado, degustaciones y eventos sobre especialidades DOP e IGP, para conocer y degustar la excelencia de la comida y el vino italianos y europeos.

Para comprender el daño significativo causado a la industria agroalimentaria italiana por Italian Sounding, un término que identifica la piratería internacional que utiliza indebidamente palabras, colores, lugares, imágenes, denominaciones y recetas que recuerdan a Italia para alimentos falsificados que no tienen nada que ver con el sistema productivo nacional, cabe recordar que en términos económicos se ha valorado en más de 100 millones de euros de ingresos perdidos y lamentablemente la cifra está destinada a crecer porque el producto italiano atrae mucho en los mercados extranjeros.  

Lo que hizo estallar la falsificación - se queja Coldiretti - fue paradójicamente el "hambre" de Italia en el exterior con la proliferación de imitaciones low cost pero también las guerras comerciales derivadas de tensiones políticas, como el embargo ruso, con un verdadero auge en la producción local de alimentos falsos Made in Italy, desde el salami italiano hasta la mozzarella “Casa Italia”, desde la ensalada “Buona Italia” a la Robiola, pasando por la mortadela a la milanesa, el parmesano o la burrata, todos elaborados con rigor en el país de Putin. Lo que preocupa -continúa Coldiretti- es también la nueva temporada de acuerdos comerciales bilaterales inaugurada con la Canadá (Ceta) que por primera vez en la historia la Unión Europea legitima la piratería alimentaria en detrimento de los más prestigiosos productos Made in Italy en un tratado internacional, otorgando explícitamente la luz verde a las imitaciones que explotan los nombres de las especialidades nacionales, de Asiago a Fontina de Gorgonzola a Parma y jamones San Daniele, pero Parmigiano Reggiano también se produce y comercializa libremente desde Canadá con la traducción de parmesano.

El resultado es que las exportaciones agroalimentarias Made in Italy, que en 2018 alcanzaron un valor de 41,8 millones de euros gracias a una tasa de crecimiento del 1,8% que, sin embargo -subraya Coldiretti- se ha reducido a cerca de ¼ de la de 2017 cuando se produjo un aumento del 7 % fue grabado.

“En otras palabras, en el extranjero más de dos de cada tres productos de tipo italiano son falsos” dice el presidente de Coldiretti Ettore Prandini al subrayar que “un mayor rigor a nivel nacional con las nuevas reglas sobre el etiquetado del origen de los alimentos Made in Italy es importante para ganar mayor credibilidad en las negociaciones internacionales y vencer el llamado “Sonido italiano”. ”.

Un fenómeno que afecta a todos los productos en diversos grados, desde embutidos hasta conservas, desde vinos hasta quesos pero también aceite de oliva virgen extra, salsas o pastas y cubre todos los continentes. En realidad, a diferencia de lo que ocurre con otros rubros como la moda o la tecnología, no son los países pobres los que falsifican la comida italiana, sino sobre todo los emergentes o más ricos, empezando por Estados Unidos y Australia. En lo más alto del ranking de los productos más falsificados se encuentran los quesos, empezando por el Parmigiano Reggiano y el Grana Padano, con una producción de copias que supera a la de los originales, desde el parmesao brasileño al reggianito argentino hasta el parmesano repartido por todos los continentes.

Pero también hay imitaciones de Provolone, Gorgonzola, Pecorino Romano, Asiago o Fontina. Entre los embutidos, los más prestigiosos son los clonados, desde Parma hasta San Daniele, pero también la mortadela de Bolonia o el salami hunter con aceite de oliva virgen extra o conservas como el tomate San Marzano que se produce en California y se vende en todo Estados Unidos. Desde el Bordolino argentino en la versión blanca y roja con la bandera tricolor hasta el Kressecco alemán, pasando por el Barbera blanco producido en Rumania y el Chianti hecho en California, el Marsala sudamericano y estadounidense son, finalmente, solo algunos ejemplos de los falsificaciones e imitaciones de nuestros vinos y licores más prestigiosos.

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