No vale el Scudetto pero siempre es un gran reto. Atrás quedaron los años de Maradona y Van Basten, cuando Nápoles y Milan luchaban por el campeonato, pero una vez más el partido en el San Paolo (20.45 h) conserva un encanto comparable a pocos otros de la Serie A. Y entonces el título está en en cualquier caso a la mitad, aunque solo sea para los azzurri: de hecho, los rossoneri no tienen nada que ver con la lucha por lo más alto, pero les gustaría, por lo que intentarán arruinar los planes de sus rivales. Sobre el papel, ça va sans dire, parece que no hay partido: el equipo de Sarri es demasiado superior, al menos por lo que hemos visto hasta ahora. Sin embargo, ¡ay de subestimar a los hombres de Montella, cuyo potencial sigue siendo al menos misterioso! Y luego está en juego la Champions League, que el martes verá al Napoli enfrascado en un auténtico partido de interior o exterior ante el Shakhtar: en definitiva, en el San Paolo no se puede dar nada por sentado, en un sentido o en otro.
“La confianza y la seguridad contarán, habrá que limitar la posesión del balón y lo puedes hacer con la agresividad adecuada – pensó Montella. Tenemos nuestras armas, estamos encontrando nuestra identidad". Ningún comentario (como siempre) en cambio de Sarri, que de todos modos no parece dispuesto a pensar en la Champions: contra los rossoneri veremos el 4-3-3 de los mismísimos titulares con Reina en la portería, Hysaj, Albiol , Koulibaly y Mario Rui en defensa, Allan, Jorginho y Hamsik en el centro del campo, Callejon, Mertens e Insigne en ataque. Módulo confirmado también para Montella, que confirmará el 3-5-1-1 de los últimos partidos con Donnarumma entre los postes, Bonucci, Romagnoli y Musacchio en la zaga, Borini, Kessie, Montolivo, Locatelli y Bonaventura en el centro del campo, Suso detrás del punto único de Kalinic.
