La agencia de calificación Moody's ha puesto en revisión las tres principales divisiones del banco franco-belga Dexia, que actualmente se encuentra clasificado con un rating A3 para la deuda a largo plazo y Prime -1 para la deuda a corto plazo. Los temores de Moody's provienen de la exposición excesiva de la institución a la crisis griega, que podría conducir a la insolvencia.
Según la agencia de calificación, Dexia se verá obligada a hacer un uso más intensivo de los préstamos a corto plazo, debido a la volatilidad del mercado, "lo que probablemente se traduzca en una compresión de las reservas de liquidez disponibles".
Hoy se reunirán los ministros de Hacienda de Francia y Bélgica para debatir la situación de Dexia. Algunos ruidos especulan una posible plan de integración con Banque Postal y Caisse des Depots et Consignation (Cdc).
Las acciones de Dexia en París perdían un 8,29% hasta los 1,327 euros a media mañana.