comparte

Montecampione: La hazaña de Aru electrifica el Giro

GIRO D'ITALIA - El corredor sardo de Astana también despega a Quintana y gana en la montaña donde sobresalen campeones como Hinault y Pantani - Uran no brilla pero mantiene el maillot rosa - Aru salta al cuarto puesto de la clasificación 2'24" del colombiano - Pozzovivo cede en la final pero sigue en la carrera.

Montecampione: La hazaña de Aru electrifica el Giro

Una cara que huele a ciclismo antiguo como la hazaña que logró en una subida donde ganaron campeones como Hinault y Pantani: Fabio Aru le dio al Giro una de las páginas más hermosas que quedarán en los archivos de la edición de 2014, no solo porque es el primer sardo en ganar una etapa de la carrera rosa. Dejar la compañía de los mejores en la estacada, a menos de cuatro kilómetros de la meta, cuando los desniveles de una subida interminable como la de Montecampione se convierten en pared tras curva, nunca es fácil.

Se convierte en una proeza cuando estás entre los cinco primeros de la clasificación a poco más de tres minutos del maillot rosa -poco si se piensa en los desniveles que afrontará el Giro en la última semana de carrera tras el descanso de hoy en Ponte di Legno. Al sprint de Aru, Uran cedió claramente, aunque parecía más afinado y reactivo que el día anterior en la ascensión a Oropa, tanto que hizo una pizca de ataque a mitad de la ascensión. Pero ni siquiera dos grimpeurs como Nairo Quintana, hasta el día de hoy una esfinge sobre los pedales, y Pierre Rolland, que entretanto había ganado el maillot rosa junto al colombiano Duarte, no pudieron enganchar al abanderado del Astana. 

En el forcejeo de los últimos kilómetros también se mantuvieron desprendidos Cadel Evans y Pozzovivo, que parecían pagar un poco la hazaña de la etapa anterior. El final fue un derroche de aplausos para Aru que en la meta, agitando los brazos frenéticamente, desató toda su alegría y emoción. Una victoria que le da a Aru una dimensión diferente al lanzarlo a la refriega de los que pueden ganar este Giro, aún en busca de un maestro.

Será pronto para saber si ha nacido una nueva estrella pero seguro que el ciclismo italiano en este Giro -que parecía reservar “cero tituli” para el pedal azul dada la primera semana de carrera, la del festival australiano- está trayendo hacia fuera, potenciándolos, frescos (Aru y Diego Ulissi) o bien maduros (es el caso de Pozzovivo) que junto a Vincenzo Nibali -esperado en el Tour- hacen menos inexorable el declive de la vieja guardia, los Scarponi, Cunego y Basso doloroso.

Lágrimas de felicidad y un botín de preciosos segundos entre desprendimiento y bonificación, Fabio Aru cuenta la ventaja acumulada con un empate que ha sido una navaja para todos: Quintana, que es el más fuerte en subida pero no lo ha demostrado hasta ahora, finalizó tercero 22 por delante de Rolland pero precedida por Duarte; quinto a los 42” llegaba Uran que mantiene el maillot rosa pero que ve desmoronarse día a día las ventajas obtenidas en su extraordinaria contrarreloj, mostrando un empeoramiento en las subidas reflejando la mejora en las contrarreloj.

Ante los picos que tiene que afrontar el Giro mañana en los 139 km desde Ponte di Legno hasta la ascensión final de Val Martello con Gavia y Stelvio de por medio, el inesperado empañamiento de las cualidades de escalador es un toque de atención para las ambiciones rosas. de Urán. Tampoco debe dejarse engañar por el reforzamiento de su ventaja sobre el segundo con el que Uran retomará la 16ª etapa porque Cadel Evans -décimo junto a Hesjedal a 1'13" de Aru- parece cada vez menos convincente, a pesar de su habitual determinación y clase, tan pronto como las pendientes se vuelven difíciles. 

En la clasificación Aru, con la hazaña de ayer ya está cerca del podio, cuarto a 2'24” de Uran. Segundo es Evans con una diferencia que ha subido a 1'03” seguido muy de cerca por Rafal Maika que ayer volvió a defenderse bien, finalizando sexto a sólo un par de segundos de Uran. El enigmático Quintana es quinto a 2'40" seguido de Pozzovivo a 2'42" y el holandés Kelderman (ayer menos brillante que otras veces) a 3'04". Los demás están ahora mucho más atrás: Rolland, siempre combativo pero muy poco concreto, es octavo con 4'47”; el noveno croata Kiserlosvki tiene más de 5 minutos y medio de retraso.

Wouter Poels cierra el top ten a más de seis minutos de él, abordado por Ryder Hesjedal, que sin la desafortunada contrarreloj por equipos de Belfast todavía estaría en la partida; duodécimo, con un retraso de 7'42” acumulado dignamente, Ivan Basso, que comparte edad con Evans -ambos nacidos en 1977- y el mejor palmarés de los titulares en el Giro. En cuanto a las cuotas de las casas de apuestas, tras la hazaña en Montecampione Aru ya está en el podio: figura 7, sólo por detrás de los dos colombianos Quintana (2,5) y Urán (3). mientras que Evans descendió al 15 también superado por Pozzovivo cotizado 10. 

Revisión