Dos italianos murieron en Libia, en las afueras de Sabrata, ciudad del noroeste del país africano. Así lo dio a conocer la Farnesina, que informa que solo a partir de las primeras informaciones y aún a falta de la disponibilidad de los cuerpos, podrían ser dos de los cuatro empleados italianos de la constructora Bonatti, secuestrados en julio de 2015. Fausto Piano y Salvatore Failla (los otros dos son Gino Pollicardo y Filippo Calcagno, ed), quienes fueron asesinados durante un traslado durante el cual un grupo de terroristas del ISIS supuestamente atacó un convoy, causando también otras víctimas.
Según un testigo, los dos italianos podrían haber sido "utilizados como escudos humanos por los yihadistas del ISIS", y habrían muerto "en enfrentamientos con las milicias". Todavía no está claro qué pasó. en el ataque al menos siete presuntos yihadistas habrían muerto, la mayoría de nacionalidad tunecina. Además, una mujer murió y un niño resultó herido en los enfrentamientos.