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El Giro de Italia descubre a Formolo, vencedor en La Spezia

Espectacular solo en el final del veneto de veintidós años. Aru ataca, Contador y Porte defienden. Uran se rinde, Matthews se derrumba: Clark nueva camiseta rosa. Ascenso final en Abetone hoy: será una batalla entre los grandes nombres.

El Giro de Italia descubre a Formolo, vencedor en La Spezia

La transmigración de maillots rosas entre australianos continúa en el Giro: en La Spezia se retransmite la primacía de Simon Clark, arrebatándole el símbolo de primacía a su compañero de equipo, Michael Matthews, en una gran dificultad en la subida al Passo del Termine. Con la llegada a la cima de Abetone a la espera del Giro de hoy, la fiesta del canguro parece estar contada aunque Orica pueda lanzar a otro de sus corredores, Esteban Chaves, colombiano y como tal buen escalador. 

Un joven de XNUMX años de Marano di Valpolicella ciertamente acaba de florecer y tiene un futuro por delante que seguir y que ayer encantó a todos al ganar una etapa insidiosa y difícil por correo: es Davide Formolo en su primer éxito en su carrera, un ciclista al que Vincenzo Nibali conoce bien tras haber sudado las clásicas siete camisetas para domar su combatividad y vencerle en el campeonato italiano el pasado mes de junio. 

Formolo, que apenas llevaba un año como profesional, formaba parte de la fuga de una treintena de corredores -entre ellos Clark, Kreuziger, Chaves y Visconti- que poco antes de la mitad de la etapa acumulaba una ventaja de unos diez minutos sobre el grupo de Contador. . A unos quince kilómetros de la meta, cuando el grupo de los mejores había alcanzado a la mayoría de los fugitivos, Formolo, con una actuación soberbia, salió volando solo en el último tramo, resistiendo la persecución desatada a sus espaldas. 

Una victoria tan bonita que desde ayer por la tarde muchos se han dejado augurar que ha nacido una nueva estrella en el firmamento del ciclismo italiano. 22” detrás de Simon Clark regulaba al grupo de perseguidores cruzando la línea de meta con los brazos en alto al cielo convencido de haber ganado. Se había olvidado de Formolo, pero enseguida se consoló con el maillot rosa. 

En este reducido grupo de una decena de corredores, además de los últimos que quedaban de la fuga inicial, incluidos Kreuziger, Chaves, Visconti, Atapuma y Cataldo, también estaban Contador, Aru y Porte pero no Rigoberto Uran, que finalizó a 1'04 ” de Formolo. Y el colombiano es el gran perdedor de una jornada en la que el Astana con Aru puso en aprietos a Contador, que era bueno parando los ataques del sardo. 

Pero para el equipo Pistolero, Tinkoff-Saxo, ayer fue un día complicado, tácticamente nada fácil de manejar cuando Kreuziger, que había entrado en la escapada que caracterizó la etapa, se encontró con unos diez minutos de ventaja sobre los mejores. De los treinta fugitivos, él era el único pez gordo, potencialmente capaz de ganar una gran carrera por etapas de tres semanas: y el checo, también por orgullo, lo dio todo mientras crecía el bochorno en la casa Tinkoff-Saxo, que él pudo frenar a Kreuziger pero al mismo tiempo dio orden a sus hombres de adelantarse al grupo para disparar acelerando el paso. 

Una elección que no debió alegrar a Kreuziger y que confirma que la misión de la selección rusa es llevar a Contador a la plantilla de Milán. También a Pozzovivo, el desafortunado piloto lucano que se cayó en la etapa del domingo y acabó en el hospital temiéndose lo peor, le hubiera gustado llegar allí, quizás al podio. Afortunadamente, sus condiciones han mejorado lo suficiente como para seguir la hazaña de Formolo en la televisión. Probablemente volverá a andar en bicicleta en la próxima Vuelta a Suiza. 

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