Luego de un duro enfrentamiento que se prolongó hasta altas horas de la noche, se logró lo importante acuerdo entre sindicatos y empresas para gestionar las actividades productivas de las fábricas en estas semanas de emergencia por el coronavirus, evitando parar la economía y sobre todo dando seguridad a los trabajadores. El Gobierno también contribuyó al acuerdo entre CGIL, CISL, UIL, Confindustria y Confapi y así se llegó a un "protocolo normativo de medidas para contrastar y contener la propagación del virus Covid-19 en los lugares de trabajo".
“El acuerdo firmado -explican los sindicatos en una nota conjunta- permitirá a empresas de todos los sectores, mediante el uso de amortiguadores sociales y la reducción o suspensión del trabajola seguridad de los lugares de trabajo. Los trabajadores y trabajadoras italianos podrán actuar y contribuir en la adaptación de la organización de la empresa y los ritmos de producción para garantizar la máxima seguridad posible y la continuación de la producción esencial para no detener el país". Por tanto, las fábricas permanecerán cerradas unos días para adaptar las plantas al protocolo, pero luego, aunque no esté a pleno rendimiento y con las debidas precauciones, la industria no se detendrá.
“Importante – concluyen los sindicatos – es la firma del texto por el Gobierno que, en el ámbito de su competencia, favorecerá la plena aplicación del protocolo". El acuerdo se refiere a aquellos que no pueden recurrir al trabajo inteligente y se produjo después de un duro enfrentamiento, dado que Confindustria estaba presionando por un "código de autorregulación" menos estricto y sin sanciones. Una especie de manual de buenas prácticas voluntarias que las empresas pueden cumplir o no, en total autonomía sin discutirlo con los representantes de los trabajadores. Y sin verse obligados a cerrar, aunque sea por unos días, para permitir la higienización de los ambientes y ponerse al día.
“El acuerdo alcanzado por el Gobierno y las confederaciones – agregó Marco Bentivogli, secretario general de Fim Cisl – es la referencia útil para garantizar la seguridad en las fábricas. Continuaremos la comparación en todas las empresas para que se implementen mejor las medidas que indica el nuevo Protocolo y la Dpcm. Entre medidas se prevé la posibilidad de suspender las actividades productivas donde no se pueda garantizar la seguridad de los trabajadores. El bloqueo temporal, o una fuerte reducción de la producción, sigue siendo, de hecho, la mejor opción para frenar la emergencia a partir de las zonas más afectadas”.
