comparte

Caída de Contador, aprensión en el Giro de Italia

El maillot rosa envuelto en una espantosa carambola en el sprint en Castiglione della Pescaia ganado por Greipel – Sin fracturas: el Pistolero no quiere retirarse, pero el miedo permanece

Caída de Contador, aprensión en el Giro de Italia

Para el idiota de siempre que extiende el brazo más allá de las barreras para fotografiar el sprint del pelotón en Castiglione della Pescaia -ganado por el alemán André Greipel-, el Giro corre el riesgo de perder a su principal protagonista, ya en la escuadra desde la etapa de Abetone. Alberto Contador voló por los aires en una impresionante carambola a cien metros de la meta, su hombro izquierdo golpeó el suelo en una maraña de piernas y bicicletas. Una docena de corredores se quedaron con él en el suelo. 

El más maltrecho con una fractura compuesta de húmero fue Daniele Colli, quien, rozando las barreras para encontrar un hueco, tuvo que hacer un brusco viraje para esquivar al desprevenido espectador. Colli golpeó a Contador, desencadenando la maxi-caída. El Pistolero apenas pudo volver a subirse a su bicicleta para terminar la etapa con tristeza. Su retraso fue obviamente neutralizado ya que el accidente se produjo en los últimos 3 metros. 

Pero para el maillot rosa la pesadilla de otra dolorosa retirada se cernía tras la, de nuevo por una caída, en el Tour del año pasado: Contador tenía prácticamente inmovilizado tanto el brazo izquierdo que en el podio de entrega de premios no pudo ni ponerse el maillot. sobre rosa que tristemente se limitó a levantar con la mano derecha. El estado de ánimo en la casa Tinkoff era sombrío. Los primeros diagnósticos hablaban de una subluxación del hombro izquierdo pero había miedo a las fracturas. 

Hasta la organización del Giro entró en fibrilación, porque un Giro sin Contador sería una carrera tullida, privada de ese desafío a tres bandas, con Aru y Porte, que ya había protagonizado la etapa de Abetone incendiando la carrera rosa. El propio Aru, que se encuentra a tan solo 2 segundos del español en la clasificación, felicitó a su gran rival para que pueda continuar la carrera. 

Sin embargo, el único que no pensó en retirarse fue él, aunque el dolor era evidente en su mueca. Por la noche, las radiografías descartaron fracturas. El resultado no borró el miedo a la retirada -se decidirá esta mañana-, pero reforzó las ganas del maillot rosa de continuar el Giro. 

Un Giro que afronta el as ibérico con la ambición de lograr un doblete histórico con el Tour que le devuelva un desafortunado cuatrienio entre caídas y la discutible descalificación retroactiva de 24 meses por dopaje que anuló efectivamente sus victorias en el Tour de 2010 y en el Giro 2011. 

Revisión