comparte

Licitaciones públicas, Banco de Italia: "Los mejores no entran"

Según un estudio de Via Nazionale, la ineficacia de la selección está ligada principalmente al exceso de nocionismo de las pruebas y a las largas listas de los llamados "no ganadores idóneos" - De media, estudias 5 meses para aprobar un concurso público y casi un candidato en 2 no funciona mientras se prepara

Licitaciones públicas, Banco de Italia: "Los mejores no entran"

I concursos públicos italianos son estropeados por “distorsiones” que dificultar "la entrada de los mejores candidatos con el perfil más adecuado". Esto es lo que leemos en un estudio realizado por cuatro economistas del Banco de Italia (Cristina Giorgiantonio, Tommaso Orlando, Giuliana Palumbo y Lucia Rizzica), titulado "Incentivos y selección en el sector público.

Los problemas se encuentran sobre todo en la zona, donde las posibilidades de éxito de los candidatos suelen ser mínimas. Hasta el punto de que, según el análisis de Via Nazionale, "en el período 2001-2015, las regiones y las autoridades locales casi prohibieron 19 mil concursos para trabajos permanentes, con un promedio de ni siquiera 2 puestos disponibles por competencia.

La principal "criticidad" a afrontar, prosiguen los economistas de Palazzo Koch, es "el alto grado de rigidez" de la selección, con "pruebas escritas y orales destinadas principalmente a comprobar conocimientos teórico-nocionales".

El estudio también muestra que cada candidato contratado "estudió en promedio unos cinco meses hacer la prueba" y "más del 45% solo ha estudiado en ese período, no realizar otras actividades laborales".

Teniendo en cuenta que en 2014 más de 280 mil personas "han enviado una solicitud para participar o han realizado pruebas en un concurso público - continúa el análisis - se puede calcular que todos los años en la economía italiana están empleados más de un millón de meses para la preparación de concursos públicos.

Dado que "el salario medio neto mensual es de aproximadamente 1.300 euros", se deduce que, según el Banco de Italia, "el coste de oportunidad estimado para el país se estima en unos 1.4 millones de euros al año”, que puede “desalentar a los candidatos más capaces”, más bien generando “una ventaja para quienes tienen más tiempo para dedicarse a la preparación de la prueba (generalmente los desempleados)”.

Palazzo Koch señala con el dedo el exceso de conocimiento en los criterios de selección, que de hecho limita "la capacidad de los administradores de la organización para evaluar la posesión, por parte de los candidatos, de características incluso relevantes para las tareas que les serán confiadas, tales como ambiciones de carrera y motivación intrínseca".

Otro elemento de ineficiencia, según Bankitalia, lo constituye la listas de candidatos adecuados (aproximadamente 7 candidatos por cada adjudicatario), que dan lugar a rankings muy largos de media y por tanto hacen que la publicación de las licitaciones sea irregular.

En cuanto a las novedades introducidas por el reforma della pubblica amministrazione firmada por la ministra Marianna Madia, que prevé, entre otras cosas, centralizar el proceso de selección reduciendo las listas de candidatos idóneos, que según los expertos del instituto central van en "una dirección coherente", pero no son "capaces de afectar ciertos cruces cruciales".

Sin embargo, el juego sigue más abierto que nunca, teniendo en cuenta que las decisiones finales llegarán dentro del próximo mes de febrero con el texto refundido sobre empleo público.

Revisión