Los bailes de los distintos consorcios comienzan en via dell'Astronomia (la sede de Confindustria en el distrito Eur, Roma). Bergamaschi y venecianos, los pros Montezemolo y Della Valle, o los que le guiñan el ojo a Marchionne utilizándolo como ganzúa para desquiciar las estructuras consolidadas. Y de fondo se alza la gran división de todos los tiempos: los capitanes de la gran industria estatal, contra los feroces exponentes de la galaxia PMI. En este escenario en evolución, aparece ahora, más allá de los rumores, el primer candidato importante: Alberto Bombassei, ya un hombre fuerte de Confindustria.
“En estos días de espera – escribe Dario Di Vico en Mensajero de hoy, el propietario de Brembo se reunirá con varios empresarios de alto nivel y ya ha recibido al menos dos fuertes incentivos de Luca di Montezemolo y Franco Bernabè. Bombassei, además de ser uno de los principales proveedores de Ferrari, fue suplente de Montezemolo en el equipo de presidencia de Confindustria durante cuatro años con una autonomía de dirección en las relaciones sindicales mucho más amplia que la que disfrutaba con Marcegaglia”.