comparte

Air France: la huelga de pilotos continúa hasta el viernes, las pérdidas ya ascienden a 100 millones

Los pilotos de Air France continúan la huelga que lleva ya una semana: 100 millones de euros ya perdidos por las protestas, y si la movilización sigue adelante como ha declarado el sindicato hasta el viernes, cada día costará 15 millones.

Air France: la huelga de pilotos continúa hasta el viernes, las pérdidas ya ascienden a 100 millones

La huelga de los pilotos de Air France se prolonga desde hace una semana. Después de 10 años en números rojos, la aerolínea nacional francesa sale por primera vez del déficit, pero tiene que hacer frente a la modernización de la estructura de la empresa, que ya no está a la altura de los retos que plantean las aerolíneas de bajo coste. Sin embargo, los pilotos no están dispuestos a renunciar a un statu quo que hasta ahora les ha garantizado lujosos traslados al hotel y prerrogativas irrevocables. Así que desde hace una semana han optado por el camino de la huelga provocando unas pérdidas de 100 millones a Air France. La huelga, según el sindicato Snpl que está a cargo de la operación de protesta, se extenderá hasta el viernes. Cada día adicional con los aviones parados supone una pérdida de 15 millones de euros. 

Las reivindicaciones del sindicato y de los pilotos van todas dirigidas al plan de redefinición de la política corporativa de Air France, que apunta a no devolver los aviones solo a París o Amsterdam, manteniéndolos casi siempre en el aire, a una reducción radical de los gastos de hotel de la tripulación y contratos de trabajo estipulados de acuerdo a los estándares del mercado local. La traducción es que, al menos en teoría, habrá contrataciones de pilotos portugueses desde la base de la compañía en el país ibérico.

“Hoy Alexandre De Juniac, presidente de Air France, quiere invertir mil millones de euros en la creación de una entidad con sede en Portugal cuyos objetivos son la deslocalización, el dumping social y la elusión de impuestos y cargas sociales que pesan mucho sobre Francia”. Estos son los motivos de la protesta de los aviadores franceses, claramente explicados por Guillaume Schmid, el portavoz de los pilotos del sindicato Snpl a France Info. Mientras De Juniac responde -irónicamente- que "si se pudiera hacer una aerolínea de bajo coste con la reglas de funcionamiento de una empresa tradicional, creo que a estas alturas ya las hubiésemos sabido”. 

Los dos frentes, el de los pilotos y el de la gestión empresarial, se enfrentan en un tema que va más allá de la modernización o no de una empresa. De hecho, por un lado está ciertamente la resistencia del personal a renunciar a prerrogativas y garantías establecidas a lo largo de años de trabajo, denunciando una reticencia siempre culpable al progreso y al cambio. Por otro lado, sin embargo, hay una política de empresa -se repite, en rojo desde hace más de 10 años- que fingió durante demasiado tiempo que las aerolíneas de bajo coste eran una realidad efímera, y que ciertamente no habría influido en los objetivos en lo más mínimo de las tradicionales compañías aéreas nacionales, sobre todo Air France.

Revisión