Un año para olvidar para la agricultura. 2013 comienza a cerrarse con un saldo negativo en términos de ingresos y empleo para las empresas agrícolas. Según datos del Centro de Estudios Confagricoltura, en los primeros nueve meses del año el valor agregado agrícola cayó un 1,4%, ciertamente mejor que la industria que registró un -3,7% y que el total de la economía nacional -2,2%. Pero un descenso que se suma a varios años de descenso de la productividad. También hubo una marcada disminución de los trabajadores agrícolas que disminuyeron un 4,3% en los primeros nueve meses del año. La caída fue del 3,3% solo para los empleados. Este es un desempeño peor que el total de la economía nacional.
“2013 – señala el Centro de Estudios Confagricoltura – fue, para la agricultura, un año para olvidar: para las empresas agrícolas italianas, los efectos duraderos de la crisis y la sucesión de desastres naturales les hicieron perder ingresos y empleo. Sin embargo, hay elementos de positividad en las exportaciones agroalimentarias”. Basándose en el buen comportamiento de los mercados exteriores, el Centro Studi cree que 2014 puede ser el año de la recuperación aunque, precisa, “tendremos que trabajar todos para conseguir este resultado”.