comparte

Migrantes, la CSU a Merkel: no queremos que caiga el gobierno

Carrera contra el tiempo para reparar la brecha después de la renuncia anunciada de Seehofer. El 65% de los alemanes está con la canciller en el espinoso tema de los rechazos. Reunión por la tarde y negociación para llegar a un acuerdo antes del 4 de julio. El presidente bávaro: "La estabilidad del gobierno no está en entredicho". En Baviera, la amenaza de la extrema derecha en las elecciones de octubre

Migrantes, la CSU a Merkel: no queremos que caiga el gobierno

La crisis alemana por ahora solo se ha aplazado al XNUMX de julio: el ministro del Interior alemán, Horst Seehofer, que durante la noche amenazó con dimitir tanto del ministerio como de su papel como secretario de la CSU, ha tendido una rama de olivo a la canciller Angela Merkel a buscar una solución común y mantener la alianza de la Gran Coalición, que lleva apenas cuatro meses en el Gobierno tras los seis meses de negociaciones posteriores a las elecciones.

Tema de disputa la cuestión de los migrantes: Seehofer consideró insuficientes los resultados obtenidos por Merkel durante el último consejo europeo sobre movimientos secundarios, un tema muy querido por Alemania. El halcón bávaro insistió en la necesidad de retrocesos inmediatos en la frontera, tema sobre el que la canciller no ha llegado a un acuerdo con el resto de países.

Angela Merkel adelantó que aún no era el momento de un acuerdo con Roma sobre migrantes, pero que el diálogo sigue abierto: "por ahora no era posible, la primera ministra italiana explicó que Italia se sentía en la estacada para muchos, por años".

Para la tarde está prevista una reunión entre la CDU y la CSU para evitar una escisión dentro de la Gran Coalición y, informa Dpa, el presidente del Bundestag, Wolfgang Schaeuble, también está junto a Merkel y Seehofer, que intentarán mediar entre ambos ubicaciones.

"La estabilidad del gobierno no está en duda, y el final del grupo parlamentario conjunto tampoco es el camino correcto", dijo el presidente bávaro, Markus Söder. “Creemos que se necesita más seguridad fronteriza. Estamos dispuestos a ceder, como se debe estar en política”, aseguró Söder, tratando de enmendar la brecha.

Los democratacristianos han hecho saber que se adhieren a la línea europea de Angela Merkel, afirmando que los rechazos unilaterales a los inmigrantes no serían la solución adecuada: además, según las encuestas, el 65% de la población dice estar del lado de la canciller.

La política intransigente de Seehofer se enmarca en la estrategia electoral de cara a las elecciones de Baviera del próximo octubre, fecha límite en la que el ministro del Interior alemán deberá recuperar los votos perdidos de la derecha a favor del partido extremista AfD.

Revisión