comparte

Inter venció 2-0 a Chievo: fue la primera victoria de Mancini

CAMPEONATO - Mancini consigue su primera victoria en Verona desde que volvió al banquillo del Inter que venció 2-0 al Chievo con goles de Kovacic y Ranocchia - Ahora los nerazzurri esperan a la Lazio y escalar posiciones pero Mancini mete la mano por delante para enero : se mencionan los nombres de Cerci o Lavezzi – No de los hinchas de Balotelli

Inter venció 2-0 a Chievo: fue la primera victoria de Mancini

Y al cuarto intento Mancini acierta. Inter gana en Verona y el técnico de Jesi logra el primer éxito de su aventura nerazzurra (bis). Tres puntos fundamentales los de Bentegodi, para la clasificación (ahora el tercer puesto está a 6 puntos) y para la moral. Porque tras el choque de la semana pasada contra el Udinese, otro paso en falso habría sido fatal para las ambiciones de los nerazzurri. En cambio el Inter supo anotar, sufrir y administrar el partido: una actuación de equipo, además ante un rival en racha positiva de 5 días. 

“La victoria fue importante, nos permite acercarnos en la clasificación y ganar algo de confianza – dijo Mancini. – También estoy satisfecho porque no encajamos goles y porque los chicos hacen bien lo que hacemos en los entrenamientos. Ahora nos espera la Lazio, otro partido que ganar para seguir creciendo”. Luego viene el parón navideño y, inmediatamente después, el mercado de enero. Del que espera mucho Mancio, como también subrayó anoche. 

“Por el momento el 4-3-1-2 es uno de los pocos módulos que podemos hacer – pensó. – Sin embargo, sigo convencido de que tener extremos ofensivos hace que un equipo sea mucho más peligroso y competitivo…”. En definitiva, no Balotelli (es más, ayer los nerazzurri Curva expresaron en repetidas ocasiones su disconformidad sobre la posible operación), sí a un extremo "pesado" como Cerci o Lavezzi, por así decirlo. Veremos, mientras tanto el entrenador de Jesi tiene que encontrar los resultados con los hombres disponibles. 

En el 4-3-1-2 de anoche, D'Ambrosio reemplazó a Dodò y la dupla Icardi-Palacio en la delantera, apoyada por un Kovacic finalmente convincente. Fue el propio croata el que desbloqueó el partido después de que Handanovic, unos minutos antes, hubiera estado sensacional en un cabezazo de Paloschi. Gol encajado mal, la ley más antigua del fútbol volvió a golpear, aunque por la gran responsabilidad de la defensa de Cliven que dejó libre al 10 nerazzurri para batir a Bizzarri con un remate cercano de derecha. 

Llegó la capacidad de sufrir, hasta entonces desconocida. Chievo estuvo cerca de empatar con Meggiorini (Handanovic sigue siendo muy bueno) y Sardo (larguero), pero el Inter aguantó bien el campo, volviéndose peligroso varias veces. Y cuando Ranocchia, al inicio de la segunda parte (56'), centró de volea del delantero zurdo, se entendió que podía ser la noche adecuada. La certeza llegó en el minuto 73: Botta, nada más entrar para el asalto final, fue expulsado por protestar. 

Y así el último cuarto de hora se deslizó sin problemas hacia una victoria muy importante, quizás incluso fundamental. El tercer puesto queda lejos pero no inalcanzable. Y el próximo domingo el calendario ofrecerá el partido contra la Lazio, actualmente en el escalón más bajo del podio junto a los genoveses. En resumen, la rueda aún puede girar, Mancini tiene la tarea de conducirla en la dirección correcta.

Revisión