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La Roma sueña con Conte y supera al Milan que juega la Champions con Toro

La Roma supera al Cagliari y se sitúa en la cuarta plaza soñando con la llegada al banquillo de Anronio Conte - Última llamada Champions para el Milan que confía en Cutrone para socavar la defensa de Turín.

La Roma sueña con Conte y supera al Milan que juega la Champions con Toro

Hazlo o destrúyelo. El Milan de Gattuso se prepara para un domingo muy importante, por su presente y, sobre todo, por su futuro. El partido de casa ante el Turín (20.30 horas) es un punto de inflexión crucial en la carrera por el cuarto puesto y la victoria de la Roma sobre el Cagliari, con un adelantamiento, la hace aún más delicada. Ni que decir tiene que el planteamiento del partido estuvo lejos de ser sereno: la culpa de la Copa de Italia y laotro paso en falso en esta extraña temporada rossoneri. Curioso sí, porque si los resultados obtenidos y el juego expresado sugirieran un fracaso, entonces está todo lo contrario a la clasificación, perfectamente en línea con los objetivos de inicio de temporada. Los errores cometidos, por tanto, aún no han resultado ser determinantes, sin embargo, está claro que las bonificaciones no son infinitas y que esta noche, ante un rival cargado de posibilidades de poder enganchar (y superar en virtud de choques directos) precisamente al Milan, Gattuso ya no puede estar equivocado.

“En los momentos de dificultad siempre hemos tenido el alma, hoy nos falta – reconoció el técnico rossoneri. - También se puede jugar mal pero con sufrimiento y el corazón para salir de eso, hoy extrañamos todo eso. Nos empantanamos en esto, tenemos que estar unidos, no pensar en nuestro patio trasero, sino pensar como una sola cabeza. En Turín jugaremos por la camiseta, la carrera de los jugadores y todo el universo Milan”. Palabras fuertes, de quien sabe que realmente ha llegado al momento decisivo de la temporada. Gran parte del futuro de los rossoneri y también del suyo propio pasará desde la cuarta plaza, aunque muchos ahora piensan que las calles se separarán independientemente del resultado final. “Has estado diciendo desde julio que tengo que irme – pasó por alto el interesado. – Escucho demasiado hablar, sobre mi futuro y el de los jugadores: pero ya es suficiente, es hora de pensar solo en Milán".

Y en Turín, claro, porque el partido de hoy parece de repesca. Gattuso, tras el experimento fallido del 3-4-3 anti-Lazio, volverá al viejo (y querido) 4-3-3 con Donnarumma en la portería, Conti, Musacchio, Romagnoli y Rodríguez en defensa, Kessie, Bakayoko y Paquetà en el centro del campo, Suso, Cutrone y Calhanoglu en ataque, con Piatek sensacional en el banquillo por una elección técnica. “Tengo poca fe en el Milán, un equipo muy fuerte que jugará mañana el partido de su vida – tronó Mazzarri. – Tendremos que hacerlo más que ellos, por nuestro crecimiento y por nuestra gente”. El técnico granadino sabe que este partido le da una oportunidad, quizás irrepetible, de jugarse un puesto en la Champions, y quiere aprovecharla con el habitual 3-5-2 que verá a Sirigu entre los palos. Izzo, Nkolou y Moretti en la zaga, Aina, Meité, Lukic, Rincon y Ansaldi en el centro del campo, en apoyo de la dupla ofensiva formada por Berenguer y Belotti.

Espectadores muy interesados ​​del partido fueron el Atalanta de Gasperini (comprometido mañana contra el Udinese), el Lazio de Inzaghi (en Génova contra la Sampdoria a las 18 horas) y la Roma de Ranieri, que volvió a la cuarta plaza en solitario gracias al triunfo de ayer ante el Cagliari. Un 3-0 sin réplicas el del Olimpico, incluso cerca a la luz de las numerosas ocasiones creadas, entre las que destacan un larguero (Pastore), un poste (Dzeko) y varios milagros de Cragno. Se sabía que los Giallorossi tenían mucha más motivación que los Rossoblu, pero dados los muchos traspiés estacionales era legítimo tener algunas dudas sobre el planteamiento de la Roma y su madurez. La respuesta, evidentemente positiva para Ranieri, llegó en menos de 10' cuando los giallorossi se adelantaron incluso a dos goles gracias a Fazio (5') y al revivido Pastore (8'). El camino al cuarto puesto se convirtió así en una autopista y si el Olímpico tuvo que esperar hasta el minuto 86 para celebrar el 3-0 (Kolarov), fue sólo por mala suerte e imprecisión, no por la resistencia de un evidentemente saciado. Cagliari.

Para dar más emociones al pueblo romanista, pensó entonces Totti, autor de una declaración pro Conte que autoriza los sueños de gloria. “Antonio es uno de los mejores de Europa y hay grandes equipos detrás de él – explicó el Capitán. – Cuando puedes tener un entrenador tan fuerte entonces tienes más posibilidades de ganar, no digo que alguien así tenga carta blanca pero todo para hacerlo bien sí. Y añado que la elección no dependerá del cuarto puesto…”. Palabras que sugieren una negociación muy caliente, de lo contrario, ¿por qué arriesgarse a engañar a una plaza caliente como Roma? Y los posteriores de Ranieri (“¡Me encantaría ver a Conte en este banquillo, de hecho iría a recogerlo al aeropuerto!”) van aún más en esa dirección. Pero queda por ver si no depende del cuarto lugar: es por eso que Turín-Milán realmente puede cambiar el destino de muchos. 

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