Toyota Motor, que regresa de un año récord que devolvió a la compañía japonesa a lo más alto de las listas de ventas mundiales, elevado por más del 10% las estimaciones sobre el beneficio neto para el ejercicio 2012-2013, llevándolos hasta los 860 millones de yenes (6,9 millones de euros), debido a la evolución mejor de lo esperado del mercado estadounidense ya la caída del yen.
La compañía japonesa cerró el último trimestre de 2012 con un beneficio neto de 99,9 millones, cifra inferior a las estimaciones de los analistas, pero claramente superior, en un 23,5%, respecto a la registrada en el mismo periodo de 2011, en un momento en el que Toyota tuvo que hacer frente a las dificultades de producción y venta ligadas a los efectos del tsunami.