¿La crisis financiera? Es causado por... la cocaína. Esta vez no se trata del cliché habitual ni de las habladurías frecuentes sobre el mundo de los negocios, sino de la autorizada (aunque audaz) tesis del profesor de inglés David Nutt, neuropsicofarmacólogo y exasesor de drogas del gobierno del Reino Unido.
Nutt, que ya provocó un escándalo en 2009 al afirmar que "consumir éxtasis básicamente no es más dañino que montar a caballo", no se anduvo con rodeos en una entrevista difundida hace unos días a Sunday Times: “Los banqueros han corrido riesgos absurdos en los últimos años por el consumo excesivo de cocaína, que como es bien sabido implica un aterrador estado de excitación y baja conciencia". “Por el consumo de cocaína se han vuelto demasiado confiados en sí mismos y nos metieron en este terrible lío”., falló Nutt en clara referencia a la crisis del sistema bancario y financiero internacional, que según él sería provocada por el uso frecuente de la pólvora blanca.
Sin embargo, la teoría de Nutt indemostrable, sin embargo podría ser creíble y ciertamente tomado como axioma en una de esas tantas charlas de bar en las que se intenta tamizar la vida de los poderosos. Lo cierto es que los banqueros sí han hecho algún daño, aunque para ser honestos, la credibilidad del profesor de inglés también se ha visto algo dañada en los últimos años.
En efecto, David Nutt fue despedido por el gobierno en 2009 de su posición histórica como gurú de las drogas y estupefacientes tras la famosa entrevista en la que comparaba los daños del éxtasis con los que puede causar montar a caballo, y en la que argumentó que el éxtasis y el LSD son en realidad menos dañinos que el alcohol.
Un personaje incómodo, pues, ya que está absolutamente a contracorriente y, a menudo, en conflicto con las decisiones gubernamentales: hace dos semanas, por ejemplo, antes de dar a los banqueros adictos a la cocaína, había expresado sus dudas sobre las leyes del Reino Unido que han prohibido el uso de "hongos mágicos" desde 2005, éxtasis y cannabis: "Estas restricciones dificultan la investigación médica como dificultan el acceso a uno de sus ingredientes, la psilocibina, que se utiliza para tratar la depresión”.
Aquí también, algún tradicionalista o respetable podría indignarse fácilmente, pero ¿y si el profesor Nutt no está del todo equivocado? Posible, siempre que no haya montado demasiado antes de pronunciar sus frases.