Tras los recortes y amenazas que han sacudido los mercados financieros mundiales en varias ocasiones, por fin una señal tranquilizadora de las agencias de calificación estadounidenses. Standard & Poor's ha confirmado la calificación de la deuda soberana de Irlanda. Dublín mantiene así un rating BBB+ a largo plazo y A-2 a corto plazo. La perspectiva también se mantiene estable. La calificación de T&C no cambia: 'AAA', como para todos los miembros de la Unión Monetaria. Los fantasmas de una nueva rebaja se van, al menos por el momento.
"Irlanda tiene suficientes recursos hasta la segunda mitad de 2013 - escribe S&P en una nota - cuando probablemente podrá volver a captar dinero en el mercado de capitales". Por lo tanto, la agencia considera alcanzable el objetivo de llevar la relación déficit-PIB por debajo del 3% para 2015 y cree que la deuda pública caerá al 103% del PIB en 2015 desde un máximo del 110% en 2013. Según Standard & Poor's finalmente , el porcentaje asignado a Irlanda del fondo de rescate europeo EFSF debería caer del 6 % a alrededor del 4,5 %.
