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Inps: los jubilados huyen cada vez más (+65% en 2014)

El INPS proporciona alrededor de 400 tratamientos al año en el extranjero, por un importe total de más de 1 millones de euros, en más de ciento cincuenta países - Boeri propone crear un fondo para políticas de integración de inmigrantes alimentado con 3 millones de euros de las aportaciones de los extranjeros que se fueron sin cumplir con los requisitos para la pensión.

Inps: los jubilados huyen cada vez más (+65% en 2014)

No solo los cerebros jóvenes: los jubilados también huyen de Italia. En los últimos años, un número cada vez mayor de extrabajadores ha decidido mudarse a países donde el costo de vida es más bajo y la carga fiscal tiene un menor impacto en las pensiones. Según datos del INPS, hubo 16.420 jubilados expatriados en los últimos cinco años, de los cuales 5.345 solo en 2014. El número anual de jubilados que se fueron de Italia se duplicó con creces entre 2010 y 2014, con una fuerte aceleración en el último año (+65 %). ).

El INPS desembolsa alrededor de 400 pensiones al año en el extranjero, por un importe total superior a los mil millones de euros, en más de ciento cincuenta países. El fenómeno "tiene repercusiones económicas y sociales: el pago de una pensión en el extranjero representa una pérdida económica para Italia, ya que el monto desembolsado no es consumo o inversión y genera un menor volumen de impuestos", explicó la institución de seguridad social. Entre otras cosas, en los países que han firmado un acuerdo en materia fiscal con Italia, las pensiones se pagan brutas y, para evitar la "doble imposición", se aplican retenciones en origen solo en los países de residencia. Esto significa, para nuestro país, una menor recaudación en términos de impuestos indirectos.

Sin embargo, el fenómeno no afecta solo a los pensionistas italianos, sino también a los trabajadores extranjeros que, después de haber obtenido el derecho a una pensión en Italia, deciden regresar a su país de origen o trasladarse a otro lugar. En concreto, el 71% de los jubilados que emigraron en los últimos cinco años se trasladaron a otros países europeos, el 10% a Norteamérica y el 6% a Sudamérica. Comparando 2014 con 2010, los mayores incrementos porcentuales se registran en Oceanía (+257%), África (+164%) y América Central (+114%). Considerando los pensionistas de gestión privada y pública que emigraron de Italia entre 2010 y 2014, el importe de las pensiones abonadas a los mismos asciende a 300.650.009 euros.

BOERI: 3 MIL MILLONES EN EFECTIVO DE LOS INMIGRANTES QUE REGRESAN AL EXTRANJERO

Sobre estas bases, el presidente del INPS, Tito Boeri, ha propuesto crear un fondo para políticas de integración de inmigrantes alimentado por los 3 millones de euros de aportes del INPS (capitalizados con las reglas de cotización) de los extranjeros nacidos antes de 1949 que no recibieron la pensión o la devolución de la descontribución por haber regresado a sus países de origen sin haber cumplido con los requisitos mínimos. 

Se llama 'social free riding' y es el fenómeno de los inmigrantes que, después de haber trabajado y cotizado en Italia, regresan a su país de origen sin que (o sin poder) hacer pagar sus pensiones por el INPS. El 'free-riding social' en Italia, para los nacidos antes de 1949, afecta a 198.430 extranjeros de 927.448, por lo tanto con un porcentaje del 21%, pero el fenómeno va en aumento, aunque ya no se exige antigüedad para los nuevos miembros desde 1996 contribución mínima a acceder a la pensión de vejez a los 66 años (más los meses de ajuste a la esperanza de vida). 

Pero podrían sumarse otros 3 millones a los 12 millones ya adquiridos en el futuro, porque las generaciones de inmigrantes de 1949 a 1981 (que aún no han devengado requisitos de vejez) tienen 4,2 millones de plazas de cotización abiertas antes de 96 (sujetas por tanto a la requisitos mínimos de cotización), que han desembolsado aportes por más de 56 mil millones. Al aplicar un porcentaje del 21% que no cobrará pensión, “ya ​​tenemos hoy unos 12 millones en cotizaciones que no darán lugar a pensiones”.

El informe también destaca otro fenómeno cada vez mayor, el de la fuga de pensionistas italianos que emigran y pagan sus pensiones (brutas) en el extranjero. De 2013 a 2014 hubo un total de 36.578 personas y en 2014 hubo un boom con un crecimiento del 65% en emigrantes jubilados. “La fuga de pensionistas – subrayó Boeri – es un fenómeno que nos preocupa porque erosiona la base imponible, porque muchos pensionistas obtienen exención de impuestos directos y no consumen en Italia (con efectos también en los impuestos indirectos)”. 

Además, la fuga de pensionados al exterior no es compensada por el ingreso de pensionados del INPS que regresan (24.857 de 2003 a 2014). De ahí la segunda propuesta de Boeri: "¿Por qué no invertir en servicios para los mayores, con el fin de reducir la fuga de pensionistas y atraer pensionistas del exterior?".

Finalmente, el informe del INPS señala que “Italia es uno de los pocos países que reconoce la portabilidad extracomunitaria de la parte no contributiva de las pensiones”. Así, pagamos subsidios mínimos y aumentos sociales a las personas que viven y pagan impuestos en otros lugares, reduciendo el costo de la asistencia social en estos países, mientras que en Italia no tenemos una red básica de asistencia social para quienes viven y pagan impuestos en Italia. La tercera y última propuesta de Boeri es, por tanto, “dejar de pagar prestaciones no contributivas en el exterior”. Boeri, aclarando que aún no lo ha discutido con el Gobierno, subraya que se trata de tres propuestas que "merece la pena reflexionar".

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