El Parlamento resuelve el bochornoso problema de las tasas del IMU, que aún faltan en el 94% de los municipios italianos. La solución encontrada es la más simple: no hay referencia real, sino un descuento temporal. El verdadero aguijón llegará a finales de año., por lo que la recaudación fiscal global se mantiene sin cambios en comparación con los planes para 2012: 21,4 millones de euros.
La primera cuota del nuevo impuesto sobre bienes inmuebles deberá pagarse en el plazo establecido -fecha límite fijada para el 16 de junio-, pero será calculado sobre las tarifas básicas: 4 por mil en primeras viviendas y 7,6 por mil en resto de inmuebles. Sin alterar (solo por ahora) deducciones también: 200 euros en la residencia principal y 50 euros por cada hijo hasta 26 años que viva en la misma casa. Así lo establece una modificación al decreto fiscal redactada por los ponentes Antonio Azzolini (Pdl) y Mario Baldassarri (Pdl) y aprobada ayer por la noche por las comisiones de Presupuesto y Hacienda del Senado.
A los Cafs habían dado la voz de alarma (Centros de asistencia financiera), que ayer en una carta al Ministerio de Economía hablaba de "creciente preocupación" y "gran malestar" por la falta de indicaciones sobre cómo calcular las nuevas tarifas.
Pero todo esto significa que la segunda entrega – previsto para diciembre – será muy pesado, porque se calcula "como el saldo del impuesto total adeudado de todo el año, con ajuste en la primera cuota", según establece la reforma.
Mientras tanto -y precisamente antes del 31 de julio- se emitirá a propuesta del Ministerio de Economía un Decreto de la Presidencia del Consejo que contendrá la "modificación de las tasas, las variaciones relativas y la deducción".