La presencia de grandes talentos, como pintores Piazzetta y Giambattista Tiepolo, el paisajista urbano o vedutista Canaletto y los escultores Corradini y Brustolon, por nombrar algunos, permitieron a Venecia cultivar una estética y un sentido del lujo únicos. La música se ha mantenido muy viva gracias a las creaciones de compositores como Porpora, Hasse y Vivaldi, interpretadas por cantantes de renombre mundial, como el castrato Farinelli y la soprano Faustina Bordoni.
En los hospitales, las niñas pobres o huérfanas recibían una amplia educación musical y su virtuosismo las hacía famosas en toda Europa. En la ciudad, durante el Carnaval, el drama y la farsa estaban por todas partes, y la pasión por el juego se regalaba gratuitamente al precio reducido.
Exposición organizada por la Réunion des musées nationaux – Grand Palais, en colaboración con la Fondazione Musei Civici di Venezia, Venecia, donde se presentará la exposición después de París (23 de febrero – 9 de junio de 2019).
él ve también la colaboración del Conservatorio Nacional de Música y Danza de París, respectivamente los teatros Gérard Philipe y La Criée de Saint-Denis y Marsella y el Pavillon Bosio, la Escuela Superior de Artes Visuales de Múnich, que se sumó a las felices combinaciones.
Macha Makeieff, curadora, ha diseñado espacios que cuentan una historia viva de esta Venecia deslumbrante y tejen un viaje de sensaciones y sorpresas: ecos de música, danza y teatro y eventos nocturnos regulares para visitantes ansiosos por volver a la laguna.