El primer ministro Mario Monti llevó hoy al Consejo de Ministros una disposición de iniciativa propia que define el perímetro y el contenido del posible ejercicio de las facultades otorgadas por el decreto sobre la acción de oro.
En particular – explica una nota del Palazzo Chigi – el texto define el reglamento para la identificación de actividades de importancia estratégica para el sistema de seguridad y defensa nacional.
La disposición permite aplicar los poderes especiales delegados en el Primer Ministro a propuesta del Ministro de Defensa y, en el caso de empresas controladas por el Estado, a propuesta del Ministro de Economía. La condición previa para el ejercicio de estas facultades es la existencia de una amenaza de "perjuicio grave" a los intereses esenciales de la defensa y la seguridad nacionales.
“Básicamente – explica Palazzo Chigi – el Primer Ministro puede ejercer sus 'poderes especiales' imponiendo condiciones específicas a la compra de participaciones; vetar la adopción de los acuerdos sociales más significativos o la aplicación de condiciones específicas, si fueran suficientes para garantizar una adecuada protección; oposición a la compra de participaciones que alcancen un nivel tal que comprometa los intereses protegidos según las valoraciones que se hagan caso por caso, ya que no es posible recurrir a supuestos abstractamente predeterminados (ejemplo: fijación de umbrales mínimos de Relevancia)".
Antes de entrar en vigor, el decreto será sometido al dictamen del Consejo de Estado y comunicado a las Comisiones.
