El resultado final de la esperada elecciones turcas, una especie de referéndum sobre el presidente Erdogan, aún no lo hay porque la noche del domingo 14 de mayo se dedicó no solo al recuento de votos sino a recuentos y polémicas en un clima de tensión entre los partidarios del Presidente de turno y su rival, el turco Gandhi, Kilicdaroglu.
Lo cierto es que la participación fue muy alta, en torno al 90%, lo que demuestra la importancia de unas elecciones que pueden marcar un antes y un después en la Turquía, y que con toda probabilidad la votación se realizará el 28 de mayo porque Erdogan, a pesar de tener ventaja, no llegó al 50% de los votos. Según fuentes oficiales, Erdogan está entre el 48 y el 49 % y Kilicdaroglu en el 45 %, pero eso está por verse.
Por lo tanto, el juego permanece abierto, incluso si ambos candidatos reclaman la victoria. "Ganamos", comentó Erdogan. "Es una farsa", respondió la oposición. Pronto la verdad.