El director ejecutivo de Ryanair, Michael O'Leary, escribió una carta y telefoneó a la compañía italiana Alitalia ofreciendo el llamado "feederage" de vuelos domésticos de Ryanair para sus servicios y en particular para rutas de largo radio.
En la práctica, la compañía irlandesa pondría a disposición su red de vuelos domésticos para alimentar los vuelos de largo radio de la antigua aerolínea nacional. Para facilitar la operación, la aerolínea de bajo coste abrirá una base a partir del 18 de diciembre en el aeropuerto de Fiumicino de Roma donde, en 2014, se trasladarán todos los vuelos domésticos de Ryanair y los vuelos a otras ciudades.
O'Leary se ofreció a transportar pasajeros de Alitalia con tarifas a partir de 50 euros por trayecto y solicitó una reunión con la compañía italiana "para discutir cualquier otra oportunidad que pueda haber para colaborar y ayudar a Alitalia en su reestructuración actual". Las otras nuevas bases en Italia serán Catania, Palermo y Lamezia.
Sin embargo, la aerolínea irlandesa confirma su intención de desarrollar aún más el tráfico en Roma-Ciampino, asumiendo "el cambio de los vuelos actuales de Bari y Brindisi a Fiumicino el próximo año y liberando franjas horarias para otros vuelos internacionales".