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Renzi: "El Bundesbank se mantiene al margen de la política italiana"

El Premier responde a Weidmann: “La tarea del Bundesbank no es participar en el debate político italiano” – “La relación con la canciller Merkel es excelente” – “La flexibilidad no es una de nuestras peticiones: sirve a Europa, no a Italia. Necesitamos el proceso de reformas que hemos iniciado”.

Renzi: "El Bundesbank se mantiene al margen de la política italiana"

"No he visto ninguna polémica con los políticos alemanes: la declaración del portavoz del Gobierno de Berlín confirma lo que sabemos muy bien, y es que no hay ninguna polémica con el Gobierno alemán sobre la gestión de la flexibilidad y la estabilidad". Con estas palabras, el Primer Ministro Matteo Renzi, al término de la reunión de esta mañana con José Manuel Barroso en Villa Madama, desestimó las tensiones internacionales surgidas tras un Dura intervención ante Italia de Jens Weidmann, presidente del Banco Central Alemán. En el caso que fueran ya asistieron en la mañana el número uno de Hacienda, Pier Carlo Padoan, y la ministra de Exteriores, Federica Mogherini, ambos para asegurar que no hay crisis entre Roma y Berlín. 

“Creemos que juntos debemos compartir las reglas que nos hemos dado – añadió Renzi -. En Europa hay un pacto por la estabilidad y el crecimiento, no sólo por la estabilidad. Gané las elecciones diciendo que el problema no es Alemania, sino Italia, y que tenemos que hacer reformas en casa. Pero en Europa las reglas deben referirse a la estabilidad y el crecimiento. Si sólo hablamos de estabilidad destruimos el futuro”.

En cualquier caso, el primer ministro garantizó que "la relación con la canciller Merkel, a pesar de las polémicas que he leído en los periódicos, es excelente". En cuanto a las palabras de Weidmann (“Renzi ahora nos dice qué hacer, pero más deuda no es el requisito previo para el crecimiento”), según el Primer Ministro “la tarea del Bundesbank no es participar en el debate político italiano. Respeto el trabajo del banco central alemán, cuando quiere hablar con nosotros es bienvenido, pero el supuesto es que Europa es de los ciudadanos y no de los banqueros, ni alemanes ni italianos”.

La polémica surge del pedido de Renzi de una mayor flexibilidad en la aplicación de las normas presupuestarias europeas. El Pacto Fiscal, sin embargo, no se cuestiona y el techo del déficit del 3% sigue siendo un límite infranqueable para todos (incluida Italia). “Las reglas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento hay que respetarlas al 100%, lo dice también el Tratado –recordó hoy Barroso en Roma-. Las reglas están ahí y, en nuestra opinión, permiten algunos márgenes de flexibilidad. Ningún primer ministro ha pedido que se cambien las reglas".

Sobre la mesa está más bien la hipótesis de separar las inversiones en apoyo de proyectos cofinanciados con la Unión Europea del cálculo del déficit. Un camino contemplado por el propio Pacto de Estabilidad (también sugerido hace dos años por el ex primer ministro Mario Monti), que garantizaría recursos para el crecimiento a todos los países de la UE, incluida Alemania. Por lo tanto, no tiene nada que ver con superar el techo del déficit: en ese caso, el Tratado de Maastricht contempla la posibilidad de superar el 3%, pero solo para países individuales y bajo ciertas condiciones. Se concedió hace más de 10 años a Alemania y Francia.

“La flexibilidad no es un pedido de Italia – concluyó Renzi -. Europa necesita flexibilidad, no Italia. Italia necesita el proceso de reforma que hemos iniciado”. 

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