Selectivos, bebés grandes, Mammons. El informe Istat 2016 publicado hoy confirma la tradición italiana según la cual muchos jóvenes siguen viviendo en familia hasta los treinta años.
De hecho, según el informe, el 70,1% de los jóvenes de entre 25 y 29 años sigue viviendo con sus padres. Las chicas son más "emprendedoras", cuyo porcentaje, en el mismo grupo de edad, desciende hasta el 54,7%. Lo que empuja a las jóvenes italianas a abandonar el hogar familiar ya no es el matrimonio, como sucedía en décadas anteriores, sino el estudio. Mirando los datos relativos a los matrimonios, es difícil tener dudas: en 2015 hubo 41 novias menos entre 18 y 30 años, mientras que la edad media a la que se da el gran paso es cada vez más alta: 34,3 años para los hombres. 31,3 para mujeres.
El informe también confirma otras tendencias que han sido protagonistas en los últimos años: la natalidad ha marcado un nuevo récord negativo con 488.000 nacimientos en 2015, 15.000 menos que en 2014, mientras crece el número de familias en las que solo trabajan mujeres, de 7,2% en 2004 a 10,7% en 2015.
Volviendo a la natalidad, los extranjeros que viven en nuestro país han contribuido a elevar los datos: entre 1993 y 2014 nacieron en Italia 971.000 niños de padres extranjeros.