Los contribuyentes estadounidenses finalmente tuvieron que rescatarlos del borde del abismo. Pero la apariencia demacrada y moribunda no impidió que Fannie Mae y Freddie Mac, los gigantes hipotecarios estadounidenses, se convirtieran en modelos al otro lado del océano.
Los locos -para algunos- intentos de emulación están todos en el corazón del Viejo Continente. Y el Wall Street Journal, intrigado, envió a tres periodistas a Roma, Londres y Amsterdam para estudiar el fenómeno.
El gobierno holandés anunció recientemente que intentará crear su propia versión de Fannie y Freddie para aliviar la presión sobre los bancos del país y revitalizar el mercado inmobiliario. Mientras tanto, Italia e Inglaterra están desarrollando políticas para garantizar que cada vez más personas compren viviendas, recibiendo garantías parciales del estado para ciertos tipos de hipotecas.
El cambio hacia los subsidios gubernamentales directos en el mercado hipotecario europeo tomó por sorpresa al diario estadounidense. Los planes reflejan la creciente preocupación de los políticos, que creen que la escasez de préstamos ejercerá más presión sobre la recuperación. Pero algunos expertos se preguntan si estas políticas podrían conducir a burbujas inmobiliarias o a un sistema en el que los bancos pidan cada vez más a los gobiernos que respalden préstamos para los grupos de mayor riesgo.
Fannie y Freddie no otorgan préstamos, los compran a los prestamistas y los convierten en bonos. En 2008, el gobierno de Washington los rescató, una medida que requirió más de $150 mil millones en dinero público. Mientras tanto, la Administración Federal de Vivienda, la agencia estadounidense que garantiza hipotecas para ciertas clases de prestatarios, dijo el mes pasado que necesitaba una inyección de efectivo del Tesoro. Ante esta situación, varios legisladores estadounidenses han señalado a Europa como posible modelo alternativo para las hipotecas. Lástima que el Viejo Continente haya decidido corresponder las atenciones.
Y así, además de whisky, refrescos y rock 'n' roll, también hay hipotecas para los que "quieren ser americanos". Pero, señala el Wall Street Journal, “usted nació en Italia”. Evento que, en ocasiones, puede resultar salvífico.
