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La unión bancaria para restaurar el crédito a la economía

La cuestión de la unión bancaria es de crucial importancia: para restaurar el vigor de la economía europea es imprescindible avanzar por el camino de la "desfragmentación" del circuito interbancario de la Eurozona.

La unión bancaria para restaurar el crédito a la economía

No solo se extiende. Se llama "OBJETIVO". No menos que la diferencia de rendimiento entre nuestros BTP y los Bunds alemanes, el balance del sistema TARGET representa un indicador importante para evaluar la temperatura de la crisis de la Eurozona. OBJETIVO es el circuito de pagos interbancarios que se produce con el Eurosistema como contrapartida, o mejor dicho, la red de bancos centrales de los diecisiete países adherentes a la moneda única europea. En periodos "normales", la mayor parte de las relaciones crediticias y de endeudamiento entre bancos comerciales de diferentes países tienen lugar directamente entre banco y banco sin la contrapartida o la interposición de los bancos centrales. Así sucedió durante mucho tiempo hasta que los desarrollos de la crisis de riesgos soberanos han Roto el clima de confianza en el mercado interbancario europeo. Los circuitos directos se han fragmentado. Al mismo tiempo, aumentó la proporción de cuentas por cobrar y por pagar liquidadas con los bancos centrales del Eurosistema. Ocurrió principalmente en la primavera y el verano del año pasado.

En agosto de 2012, el saldo acreedor neto registrado en el sistema TARGET por los bancos alemanes alcanzó el máximo de 750 mil millones de euros. en la misma fecha yo saldos deudores netos cobrados por los sistemas bancarios de Italia y España alcanzaron picos de 290 y 430 mil millones de euros respectivamente. Sumando las posiciones de los principales acreedores y de los mayores deudores, en el verano de 2012 los saldos del sistema TARGET contrastaban un billón de créditos netos de los países "GOLF" -Alemania, Holanda, Luxemburgo y Francia- y un billón de créditos netos deudas de los “GIIPS” (Grecia, Irlanda, Italia, Portugal y España).

Gracias a un virtuoso revoltijo de elementos, hoy la situación parece haber mejorado. Las nuevas herramientas de política monetaria y la "orientación" progresista del BCE junto a otros factores como el acuerdo de unión bancaria del pasado 12 de diciembre han contribuido a romper la espiral de la desconfianza. En diciembre de 2012 el saldo acreedor neto registrado en el TARGET por los bancos alemanes se situó en unos cien mil millones por debajo del máximo de agosto de 2012. La deuda neta de los bancos italianos ha descendido hasta algo más de 250 millones, 40 menos que el pasado verano. En conjunto, tanto los créditos de los países del "GOLF" como las deudas de los países del "GIIPS" se encuentran hoy significativamente por debajo del umbral crítico de un billón de euros alcanzado hace menos de seis meses. Sin embargo, la situación sigue siendo desafiante. Nuevos pasos en la reducción de los desequilibrios interbancarios sirven para fluidificar el mercado crediticio europeo en un contexto económico que sigue siendo muy difícil en los países de la Eurozona.

Reducir los desequilibrios interbancarios es una condición facilitar la reducción de los desequilibrios que hoy se observan en la dinámica de los préstamos bancarios a empresas de la eurozona. Los datos publicados por el BCE y correspondientes al mes de noviembre de 2012 muestran en términos anuales una contracción de alrededor de dos puntos porcentuales en el crédito bancario a las empresas en promedio para el área de la moneda única. Alrededor de esta gran media está la varianza. Estos van desde un aumento de cinco puntos registrado en Finlandia, a un crecimiento de solo un punto y medio registrado en Alemania a caídas del orden de nueve puntos porcentuales en países como Portugal y Grecia. Con una contracción anual de unos cuatro puntos porcentuales, Italia es uno de los países donde la reducción del crédito a las empresas es menos acusada de lo que supone la recesión económica. En este sentido, la situación en España se presenta mucho más grave, con una caída de los préstamos a empresas no financieras de siete puntos porcentuales y una caída del PIB real que en 2012 se frenó en torno a un punto y medio. Sin embargo, la cuestión del crédito sigue siendo de importancia central para Italia, dada la alta concentración en la fuente bancaria de la obtención de recursos financieros por parte de las empresas. En Italia, por cien euros de PIB que produce el país, hay nada menos que 56 euros de crédito bancario obtenido de empresas no financieras. En Alemania, la combinación ve solo 36 euros de crédito corporativo por cada cien euros del PIB.

Recesión, reglas, tecnologías. Con razón se pide a los sistemas bancarios que contribuyan a superar la recesión y estén cerca de los sectores económicos en dificultades. La implementación completa de esta labor esencial de apoyo y selección no solo se basa en la responsabilidad microeconómica de los bancos individuales, sino que también se refiere a una serie de condiciones contextuales macroeconómicas. Es importante registrar los signos de mejora en el frente macro de la "desfragmentación" del mercado interbancario como lo demuestra la reducción de los desequilibrios del sistema TARGET. Se puede seguir avanzando avanzando en el camino hacia la consecución de la unión bancaria europea y revisando algunas disposiciones normativas, tal y como establece convenientemente la decisión del Comité de Basilea del 6 de enero sobre la naturaleza y el momento de aplicación del Coeficiente de Cobertura de Liquidez.

Es importante renovar los hilos de confianza entre los bancos y los vínculos entre el crédito y la economía. Sin embargo, también hay que recordar que el sector bancario es a su vez un sector “industrial” que hoy vive la combinación del impacto de la recesión y la transformación de las tecnologías. El aumento de la morosidad y otros préstamos problemáticos junto con el uso creciente de canales directos por parte de los clientes. Son dos olas que se combinan, y que relanzan el reto de la productividad, la selección y la simplificación. Incluso en el banco.

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