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Lodo Mondadori, dos paradojas en la maniobra con la regulación del ahorro Fininvest

por Franco Locatelli – La polémica disposición de la maniobra económica que permitiría a Fininvest diferir la compensación de 500 millones a Cir está contenida en el decreto titulado "estabilización financiera" y en un artículo que promete acelerar la solución de controversias judiciales. Es totalmente improbable que suceda

Lodo Mondadori, dos paradojas en la maniobra con la regulación del ahorro Fininvest

En la perseverancia diabólica con la que el presidente Silvio Berlusconi sigue construyendo leyes ad personam en defensa de sus intereses, y esta vez de Fininvest-Mondadori contra el Cir de De Benedetti, hay al menos dos curiosas paradojas. Son paradojas que provocarían hilaridad si no desacreditaran tanto al gobierno proponente como al sistema italiano ante los ojos del mundo y de los mercados internacionales. La primera paradoja es que la regla fraudulenta, sorpresivamente oculta en las tres últimas líneas del último párrafo del penúltimo artículo de la maniobra económica, está contenida en un decreto titulado "Disposiciones urgentes para la estabilización financiera" y que ahora es todo examen de el Quirinale. Ese título ahora suena irónico o terriblemente claro. Más allá del fondo, será curioso comprender cuáles son las razones (generales y no ad personam) de necesidad y urgencia que justifican recurrir al decreto para una disposición como la salva-Fininvest. Y si esa regla fuera confirmada y aprobada por el Parlamento, haría falta más que una acrobacia para demostrar que la estabilización financiera a la que se refiere es la del país. Quizás el título del decreto pretendía, más apropiadamente, aludir al grupo Berlusconi, que se ahorraría una suma del orden de los 500 millones de euros. A menos que el primer ministro logre convencer a los italianos de que lo que es bueno para Fininvest también es bueno para Italia. Pero la paradoja de la estabilización financiera en la versión Fininvest no es la única. La otra, como recordaba el editorial del Corriere della Sera de esta mañana en un titular ("Malos pensamientos") ya de por sí esclarecedor, es que la regla ad personam está contenida en un artículo del decreto sobre la maniobra denominado "Disposiciones para la eficiencia del sistema judicial y la pronta solución de controversias”. Suponiendo y no permitiendo que esa disposición llegue a convertirse en ley, es seguro que Cir la impugnaría ante la Casación, pero entonces es completamente obvio que el efecto final sería exactamente el contrario al imaginado por el título del artículo del decreto: tiempos no sólo largos, sino incluso más largos para resolver disputas. Con gran alegría del Caballero y un nuevo bulo contra Cir (después del de 1991, cuando un juez corrupto asignó a Mondadori al Fininvest de Berlusconi en detrimento del grupo De Benedetti) pero sobre todo a la más elemental necesidad de justicia certera y rápida.

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