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La intervención del economista Franco Mosconi sobre Corsera: "Emilia, nunca más sola"

Lejos de reformar las provincias, las grandes regiones del Norte deben aliarse en un eje de "cooperación reforzada", como podría ocurrir entre Emilia y Veneto, o entre Emilia y Lombardía para la Expo 2015 - Esta es la tesis del economista Franco Mosconi, extraído de un artículo del Corriere della Sera de Bolonia.

La intervención del economista Franco Mosconi sobre Corsera: "Emilia, nunca más sola"

“La historia de las provincias demuestra una vez más que las llamadas grandes reformas no funcionan en Italia. Quizás, en esta nueva y fundamental ocasión, sea mejor tomar el camino de la «cooperación reforzada»”. Esta es la tesis del economista industrial Franco Mosconi, profesor de la Universidad de Parma, expresada en su discurso en la edición de Bolonia del Corriere della Sera, esperando inspirarse en un modelo como el de los Lander alemanes. Este es el texto del artículo:

“Los cuatro Länder más grandes de Alemania tienen dos características en común: una alta población y una sólida base manufacturera. La más grande, con 18 millones de habitantes, es Renania del Norte-Westfalia con la capital Düsseldorf; seguida de Bavaria (Munich) con más de 12 millones; luego con 10 millones Baden-Württemberg (Stuttgart); finalmente, Baja Sajonia con 8 millones (Hannover, pero ¿cómo no mencionar Wolfsburgo?). El contraste con los números de nuestras regiones aparece en toda su amplitud.

Los alemanes son lugares que nuestros empresarios conocen muy bien. Pero hoy también hemos comenzado a discutir qué alianzas/integraciones se pueden prever entre las ciudades y regiones italianas precisamente para fortalecer la competitividad de Italia.

Dada su centralidad en la nueva red de alta velocidad, la cuestión se presenta especialmente estratégica para Bolonia, como bien ha puesto de manifiesto el artículo de Dario Di Vico en estas columnas: «Todas las ventajas del eje Bolonia-Milán» (23 de octubre). Sobre la mesa -nos lo recuerda el propio Di Vico- está también la vieja cuestión del "hermanamiento" de Bolonia con Florencia, que no parece haber dado muchos frutos hasta el momento. Finalmente, ampliando nuestra mirada a Emilia Romagna, la posibilidad de una unión con el Véneto ha sido mencionada recientemente por exponentes autorizados del consejo regional.

Ahora bien, para evitar jugar a una suerte de “Monopoly” para los administradores públicos, ¿por dónde empezar? El asunto de las provincias demuestra una vez más que las llamadas grandes reformas no funcionan en Italia. Quizás, en esta nueva y fundamental ocasión, valga la pena seguir el camino de la "cooperación reforzada", ese modus operandi inventado por los padres fundadores de una Europa unida. Dadas las debidas proporciones, entonces, se trata de elegir algunos espacios privilegiados en los que experimentar -precisamente con otras ciudades y/o regiones- instituciones y políticas comunes para llegar, en el camino, a integraciones reales y adecuadas. Ambas hipótesis sobre la alfombra parecen prometedoras. En primer lugar, Milán y Bolonia (sus dos regiones superan los 14 millones de habitantes) como «red de negocios» de cara a la Expo 2015 y más allá, con todo lo que ello implica: ferias, grandes eventos, intercambios turísticos, etc. En segundo lugar, Emilia Romagna y Veneto como "capital manufacturera" del país: de hecho, son las dos regiones con mayor intensidad de medianas empresas industriales y con una gran difusión de distritos. Estas dos regiones -un «Land» alemán, con unos 10 millones de habitantes- podrían dar vida conjuntamente a aquellas estructuras colectivas de investigación aplicada y educación técnica superior que han hecho grande a la industria alemana: los «Institutos Fraunhofer» y las «Fachhochschulen» (anunciadas como Universidad de Ciencias Aplicadas a nivel internacional).

Es razonable esperar que después de algunos años de "cooperación fortalecida" en las dos direcciones indicadas anteriormente, la fuerza de las cosas impulsará una unión integral en una dirección u otra. Las elecciones autonómicas de 2015 podrían ofrecer así la oportunidad de dar cuerpo, a nivel institucional, a lo que habrá madurado en el ínterin”.

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