Las perspectivas siguen siendo negativas para la economía italiana: según las últimas estimaciones de Istat, en 2013 el PIB caerá un 1,8 %, mientras que la recuperación se producirá en 2014 con un aumento del PIB, en términos reales, del 0,7 %. Siguen las previsiones negativas también para el mercado laboral: la tasa de desempleo, que creció rápidamente en la primera parte del año, alcanzará el 12,1% en 2013.
En 2014, aunque se estabilice, la tasa de paro seguirá aumentando “por el retraso con el que el mercado laboral sigue la evolución de la economía”. El gasto de los hogares también está en su punto álgido, que en 2013, de nuevo según Istat, registrará una contracción del 2,4%. A pesar de la persistencia de las dificultades en el mercado laboral y la debilidad de las rentas nominales, en 2014 se prevé un crecimiento moderado del gasto en consumo (+0,2%).