La prueba será hoy en un día bursátil en el que la crisis coreana arroja sombras bajistas pero Enel alcanzó ayer su objetivo al cerrar la cotización en Piazza Affari a 5,01 euros. Hacía 9 años que Enel no superaba el umbral psicológico de los 5 euros por acción.
El éxito de ayer premia la buena gestión del equipo liderado por Francesco Starace que dotó a Enel de una estrategia ya proyectada hacia el futuro, centrada en las renovables y la internacionalización, y con el comodín de Open Fiber para el desarrollo de la ultra banda ancha que está creando bastantes quebraderos de cabeza a Telecom Italia.
Pero el comportamiento bursátil de Enel es también fruto de la caída del coste del dinero y de la sostenibilidad de la deuda acumulada en el pasado con adquisiciones internacionales y sobre todo con la de la española Endesa.